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Es interesante el hecho de que los hombres feministas o antifeministas son quienes vierten más opiniones en las redes sociales y editoriales sobre el tema de la exhibición del cuerpo semidesnudo de la mujer en los medios de comunicación.
En piezas precolombinas y desde la primera cultura ecuatoriana, correspondiente a la Valdivia, se ha rendido culto a la fertilidad y al cuerpo de la mujer. La Pachamama es femenina en el animismo.
En la actualidad el sexo está sobrevalorado en nuestra sociedad. Desinhibirse y recibir un pago por ese momento de ‘liberación’ por mostrar la piel y el cuerpo es una transacción legal en nuestro país. No se trata de una cacería de brujas, en este caso de ‘modelos’ desnudas o semidesnudas. Se trata de concienciar de que está siendo normalizada en nuestra sociedad la concepción de que los hombres tienen derecho a utilizar o evaluar el cuerpo de la mujer públicamente. En favor de la dignidad de la mujer, hay que rechazar y erradicar los ‘halagos groseros’ u observaciones ofensivas.
Las imágenes forman y educan. Los adultos exhiben tabloides con fotos de mujeres semidesnudas en quioscos y sitios públicos donde diariamente circulan miles de niños y adolescentes. Hay formas de discriminación cotidianas inaceptables que perpetúan la discriminación y la desigualdad.
La unidad entre hombres y mujeres es posible aceptando diferencias, pero en equidad de derechos y deberes.
Patricia Alexandra Mantilla R.