Con mucha preocupación he visto y oído al Sr. invitado a Ecuador TV por el Sr. Rabascall el 24 de agosto. Luego de analizar sus respuestas, concluyo que no es un analista, es un opositor político al que le están dando pantalla para decir, entre otras cosas, que solo el alto precio del petróleo es el generador de la infraestructura construida en el país (saco de regalos de papá Noel). Sin embargo, no es esto lo verdaderamente importante.

Lo preocupante en realidad es que las últimas medidas tomadas y las que están en proceso, más las ventas proyectadas de activos del Estado anunciadas, hacen pensar seriamente que quizá el Gobierno esté dando un giro a la derecha. Me niego a creer que la insinuación del referido señor sea una realidad y que, más bien, las medidas obedezcan a una estrategia económica para paliar los inconvenientes que en este campo enfrentamos.

En lo específico, las concesiones tributarias a la empresa privada en discusión han despertado, como consecuencia inmediata, la ambición -como siempre desmedida- de los sectores que son incapaces de visualizar el país más allá de sus bolsillos. Piden, sin ponerse colorados, la supresión del anticipo del impuesto a la renta. ¡Qué pretensión! Bien, si esta petición es considerada, volveremos a la impune evasión tributaria y, ‘por qué no?, a enviar el producto de estos probables cambios a los paraísos fiscales, sitios tan bien conocidos por representativos miembros del sector empresarial. (O)

Kléver Medina Alvarado