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En relación al artículo que sobre la Revolución del 9 de Octubre aparece en El Telégrafo, de la autoría del escritor quiteño Ing. Juan Paz y Miño, manifiesto a usted que tiene las siguientes equivocaciones:
1.- Afirma que el primero en escribir sobre dicha revolución fue Camilo Destruge, ignorando que con anterioridad existen las tres versiones clásicas, a saber: 1) La reseña de José de Villamil editada en Lima en 1863, 2) Los Recuerdos de Vicente Ramón Roca dictados a su hijo Emilio Gerardo editada en Guayaquil en el siglo XIX, y 3) La versión del prócer Manuel José Fajardo, impresa en Lima y encontrada en un puesto de anticuarios de esa capital por el bibliógrafo Carlos A. Rolando en la década de 1910.
2.- Destruge conoció y estudió estas tres versiones pues las menciona en su obra, como le debe constar al historiador Paz y Miño.
3.- Ni Villamil ni Antepara (francmasones que hicieron la revolución octubrina) conocieron la obra de Eugenio Espejo en Quito y no tenían razón de conocerla. Villamil era un marino extranjero recién llegado a Guayaquil en 1812 y Antepara había salido muy joven de su patria, vivido en México, Inglaterra y Venezuela y había regresado a Guayaquil en 1814. Por ende, decir que ambos actuaron bajo el influjo de las ideas de Espejo es un desaguisado, por decir lo menos.
Otros errores contiene el artículo, pero quedan en el tintero para mostrarlos en próxima ocasión.
Del señor Director, muy cordialmente.
José M. Castro González
Céd.Ciud. 09-03766232