Hace 8 años ‘Cristhian’ permanece en el Centro de Rehabilitación Social del Guayas cumpliendo su condena. La sobrelleva leyendo libros de poesía y filosofía, sin descuidar su creencia en el “Supremo creador”. Ahora, tras cerca de una década de encierro, planea darle otro rumbo a su vida.

‘Cristhian’ anhela crear su propia microempresa y para ello está decidido a estudiar a distancia la carrera de Administración de Empresas desde la cárcel. Su objetivo, está más cerca de lo que cree porque como él 590 personas privadas de libertad (ppl) se inscribieron el mes pasado para rendir el Examen Nacional de Educación Superior (ENES), a tomarse el próximo 27 de septiembre.

Este plan piloto rige según lo dispuesto en la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES) que reconoce el acceso a la educación como un ejercicio efectivo de la igualdad de oportunidades y que incluye a las ppl.  

La subsecretaria general de Educación Superior, María del Pilar Troya, explica que hace un año la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt) firmó un convenio tripartito con el Ministerio de Justicia y la Universidad de las Fuerzas Armadas (ESPE) para atender al primer grupo de ppl que quería cursar sus estudios de tercer nivel.

En esta ocasión, no solo se trabajará con la ESPE, que es una universidad pública y, por ende, gratuita, sino también con la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (UCSG), que es particular. “Con ellos aplicamos el  mecanismo de políticas de cuotas y en virtud de ello (la UCSG) se ha comprometido a darles educación superior a personas privadas de libertad de manera gratuita”, explica Troya.

El artículo 74 de la LOES señala que “las instituciones de educación superior instrumentarán de manera obligatoria políticas de cuotas a favor del ingreso al sistema de educación superior de grupos históricamente excluidos o discriminados”.

Troya enfatiza que la intención es que el programa se extienda y para ello se necesitan ciertas condiciones de infraestructura. “Trabajamos con el Ministerio de Justicia porque deben ser lugares en donde tengan la posibilidad de contar con infocentros (aulas con computadoras) para que reciban la información. También (las ppl) deben acceder a internet de manera controlada y tener espacios en donde puedan hacer talleres o recibir visitas para tutorías de los profesores”.

Por ahora solo las nuevas cárceles de Guayaquil y Latacunga son las que recibirán el beneficio, “pero la idea es seguir expandiéndolo a otros centros de rehabilitación e incorporar más universidades a medida de lo posible”, dice Troya.

Aclara, además, que las carreras ofertadas en la modalidad a distancia u online cumplen con varias condiciones de acuerdo al público dirigido. “No se pueden dar a distancia y nunca serán consideradas, por ejemplo las carreras de Medicina o Educación Parvularia”, explica la funcionaria.

Las carreras que están disponibles son Contabilidad y Auditoría, Marketing, Trabajo Social, Derecho, Administración y Turismo y Hotelería.Las 3 últimas tuvieron acogida en la UCSG.

Su rector, Mauro Toscanini, señala que no habrá ninguna diferenciación puesto que “serán alumnos como cualquiera, con la única diferencia que están privados de su libertad”.

Aunque la universidad se estrenará en dar educación a los reos, en el área de educación a distancia cuentan con 10 años de experiencia en esta modalidad, por lo que Toscanini enfatiza que la rigurosidad de los estudios será la misma que en educación presencial.

“Ellos deben estar en constante contacto con su tutor y quedan registrados en la plataforma virtual. Nosotros sabemos cuántas horas ingresan a la semana, qué tiempo le dedican. Es un control cercano”, explica el principal de la universidad. La institución establece que en la modalidad a distancia -por la autonomía que tiene el estudiante- el estudio debe ajustarse a un promedio de 4 horas semanales.

Verónica Reina, directora del Centro de Educación Continua de la ESPE, espera que el plan piloto se convierta en una política pública, pues en primera instancia 33 mujeres del Centro de Rehabilitación Femenino de Latacunga aprobaron el ENES tomado en 2012.

Ante el traslado de las ppl al nuevo centro se dividirán en 3 categorías. “Hay un grupo de personas que repetirá el curso de nivelación porque reprobaron todas las materias, las que aprobaron todas las materias continuarán el tercer nivel de educación y habrá un nuevo grupo que ingresará este año”, expresa. Esta semana inició una capacitación de 75 horas en los centros de rehabilitación de Guayas y Latacunga, previo al examen que rendirán a fines de mes.

Luego viene el proceso de postulación, en donde se los ayudará a formular su proyecto de vida en función de sus habilidades.

DATOS

Los internos que accederán a la educación superior cuentan con título de bachiller. Luego de rendir el próximo ENES empezarán las clases en marzo de 2015.

De los 590 inscritos que potencialmente podrán estudiar, 36 son mujeres, es decir el 6%, porque la composición de las personas privadas de libertad indica que son menos mujeres que hombres.

Los estudiantes recibirán de manera gratuita los materiales, como CD y libros. Una vez que empiecen la carrera tendrán derecho a terminar sus estudios de manera gratuita, así cumplan su pena.

El plan de estudios para las personas privadas de libertad es el mismo aplicado a los demás estudiantes que cursan una carrera a distancia. El tiempo de las carreras de tercer nivel son 4 años, en el caso de las técnicas son 2 y en las tecnológicas 3 años.