Son varias las canoas que navegan diariamente el río Aguarico en el cantón Lago Agrio. Algunas de ellas han sido elaboradas por Orlando Huilca, un artesano de 33 años que trabaja en la construcción de las embarcaciones a base de fibra de vidrio.

Actualmente se considera un experto en su fabricación, pero cuenta que hace 8 años, cuando se inició en esta actividad, le costó un poco “hasta agarrar práctica”.

Aprendió el oficio de varios maestros, quienes previamente se habían capacitado en talleres dictados por Fundación Cofán, que llegó a la zona para trabajar con los 5 artesanos que fabricaban canoas de fibra de vidrio. Posteriormente iniciaron sus propios talleres, y fue allí donde Orlando empezó a trabajar como ayudante.

Hoy, el artesano trabaja junto a sus 3 aprendices. Romel Mendúa es uno de ellos, y asegura que Orlando es sin duda un excelente profesor “nos enseña todo lo que puede, todo lo que él sabe y, sobre todo, nos da el chance de practicar, aunque a veces le toca arreglar nuestras fallitas”, comenta divertido.

La construcción de una canoa toma de 4 a 5 días; las de 13 metros son las más solicitadas y cuestan  $ 4 mil. El artesano se enorgullece al afirmar que el costo va en directa relación con la calidad del producto. “Una canoa bien cuidada fácilmente dura hasta 10 años”.

Sus clientes son principalmente del Puyo y Coca, aunque también vienen compradores desde Putumayo y Colombia. Mientras cuenta sus experiencias, Orlando pinta la última embarcación en la que está trabajando. Manchas de color gris se aprecian en sus manos, brazos y en sus viejos jeans, que asegura utilizar específicamente para esta actividad.

Espera que en los próximos días le lleguen más pedidos para construir canoas, que además de ser su fuente de ingresos, es su actividad favorita. (I)