Los avances tecnológicos están cada vez más al alcance de los consumidores. Años atrás era casi imposible tener un reproductor musical que también fuera linterna o que sirviera para dar un detalle del clima.

En la actualidad, todo esto se puede encontrar en un teléfono inteligente, un aparato con el que se pueden hacer infinidad de cosas, desde una videollamada al otro lado del mundo, hasta ahuyentar insectos, a través de una aplicación.

La tecnología se ha convertido en nuestra aliada, a tal punto que si nos perdemos en un lugar, un mapa con sistema GPS nos ayuda a reencontrar la ruta.

Las competencias entre los grandes fabricantes hacen que la llegada de nuevos dispositivos sea cuestión de pocos días. Por ejemplo, en los primeros 3 días después de su lanzamiento, el iPhone 6 alcanzó una venta de 10 millones de teléfonos. Se espera que la versión 7 de este celular sea en septiembre.

El Samsung S5 en su primer mes en el mercado ya había vendido 11 millones de ejemplares. En los próximos días será la salida al mercado del S6 y se espera que su acogida sea mayor a la de su antecesor.

Las aplicaciones para celular tienen de todo. Se pueden encontrar juegos, recetas de comida, consejos para el auto, lugares para visitar en un país, hasta rutinas para hacer ejercicios y miles de usos más.

La tecnología trae consigo nuevas tendencias de moda. Un ejemplo es el monopod, artículo utilizado por las personas para hacer una autofoto.

Al momento de la diversión, siguen en vigencia las consolas de videojuegos. Sony lanzó el Play Station 4, mientras que su rival, Xbox, tiene sus versiones One y 360.

En computadora, el mundo virtual es envolvente. Hay personas que pasan horas jugando en línea.

La tecnología se convierte en un gran aliado al momento de resolver problemas a diario, el problema es cuando se abusa de ella, ya que de una herramienta útil puede convertirse, sin que nos demos cuenta, en una adicción.