El Telégrafo
Ecuador / Jueves, 21 de Agosto de 2025

El último episodio de Estas secretarias no quedó nada claro. Será porque seguí la serie especialmente en sus cambios de temporada, especiales como la boda de Teté y Luis Arteta hijo, y el nacimiento de Luisito, y desde la segunda temporada se notó un giro de la comedia por sketchs a una comedia con tintes de melodrama y viceversa.

Cuando se anunció por primera vez la posibilidad del final de la serie estaba más claro a dónde querían llegar los realizadores, en especial los guionistas, con la aparición del villano Vidal y el secuestro de Luis hijo.

Luego las peripecias con Luisito, su carriola rodando por toda la ciudad o su secuestro a manos del supuesto hermanastro de Luis hijo, parece que solo sirvieron para incluir con honores a Mercedes Payne, en la piel de la niñera Celinda Brownie Díaz, alias ‘Pingüé’, en el reparto principal. Ese personaje casi ni se vio en el último episodio, solo en nombre y recuerdos.

En realidad el 85% del final de Estas secretarias fue de los personajes protagonistas, menos ‘Pingüé’, en un plano conjunto en la locación principal, el área central de Arteta & Asociados donde se ubicaban los escritorios de las cinco secretarias, recordando.

No todo, solo lo que le querían contar o sobre lo que les preguntaba la antigua conserje, una de las pocas excolaboradoras que al parecer fue invitada a la despedida de Arteta & Asociados.

En remembranzas, el tan terrible show de clips que teme toda serie éxito, destacaron los amores y desamores entre Luis hijo y Teté, la personalidad de la casi olvidada quinta secretaria original Carlota interpretada por Fabiola Véliz y la relación entre Monse y Ricky, entre otros.

Lo inverosímil, aun para serie de comedia nacional, eran las apariciones de artistas nacionales, Las Chicas Dulces, Aladino y José Corozo en la piel del mensajero y cantante Alejo.

Lo de la claqueta de los cinco años después, el retorno sin razón de Pao que ya se había marchado a vivir en Londres, la cita de Alejo y Lucy para ser contratados por la supuesta nueva empresa cuando él ya había triunfado como telonero de Gilberto Santa Rosa y la revelación de la cara de Don Lucho fueron pobres excusas de momentos impactantes para un fin agridulce.

Al final se entendió que Arteta & Asociados renacería con todos los colaboradores que tuvo al momento de su cierre, excepto por ‘Pingüé’ que de niñera de Brad y Angelina pasó a ser el nuevo amor de Brad.

A lo mejor fue bueno que el partido Ecuador-Panamá en Panamá interfiriera con la emisión del 3 de junio porque los capítulos finales no tuvieron consecución lógica.

Dos se dedicaron al difícil parto de Teté y al parto de Monse, otro episodio para resolver felizmente las vidas de todos en Arteta & Asociados para demostrar que la quebrada empresa ya no era prioridad, y el último a rememorar y rememorar.

Estas secretarias fue una serie que caló en el gusto popular como comprobaron sus eventos en Mall El Fortín y la fuerte presencia en Twitter de sus episodios especiales.

Merecía un final mejor. Antes se la quiso truncar a fines de 2014, sin embargo, luego de 425 capítulos, solo se puede decir que lo que más faltó en el fin fue Álex Plúas como Jipi. (O)