Puede parecer algo sin importancia y hasta justificarse en el éxito de realities locales por sus emisiones en vivo y grandes finales, o tal vez en las transmisiones extendidas de la novela con más rating en el canal. A lo que se alude es a la capacidad eterna de los canales de televisión ecuatoriana de empezar tarde las emisiones de sus programas en los horarios de prime time y pasadas las 23:00, como sucedía con el noticiero Telemundo, que en una época debía anunciar su horario, en promos oficiales, como alrededor de la medianoche. Ese mismo noticiero ahora tiene un horario fijo de 23:30 y cada vez se lo respeta menos cuando las novelas que lo preceden se extienden de sus jornadas de 20:45 a 21:45, 21:45 a 22:45 y 22:45 a 23:30 sea por exceso de comerciales o porque Televistazo de las 20:00 también inició tarde debido a informes delGobierno. Tal vez ese último caso permita que un programa con horario definido se atrase, pero no permite que se lo extienda más allá de su duración oficial.

Es complicado para todos porque los televidentes pueden sentirse irrespetados, los patrocinadores y auspiciantes, perder su inversión al haber pautado tantas ocasiones en determinados bloques comerciales de ciertos programas, y el canal aumentar sus costos alargando su día de transmisión. Más feo se vuelve cuando esto de los atrasos afecta a los programas enlatados actuales que son comprados y puestos al aire en pos de rating como ha ocurrido con dos canales que han transmitido ShowMatch. En Canal Uno se fue cortando el espacio en el prime time, antes del Noticiero Uno Estelar o después de En carne propia, para este show cuyo mayor contenido es  Bailando por un sueño y terminó cambiándoselo de horario a los sábados en la noche que parecía poco atractivo. En Teleamazonas, siguiendo los horarios de Quito, ShowMatch 2016 tuvo que emitirse después de Azúcar y dicha telenovela después de La Voz Ecuador, lo que se mostró en promos oficiales, cuando su horario oficial es lunes a viernes, a las 23:45.

Los atrasos siguen y siguen, si no pregunte a los televidentes de TC Mi Canal cuando se emitieron novelas biográficas de cantantes que se movían de horario más de una vez. Al comprar enlatados se debe respetar el producto extranjero y darle un horario que funcione tanto para su productor original como para el canal local. El éxito de un reality en vivo no exime de cumplir con horarios ya indicados al público.

Patrocinador y auspiciante también merecen respeto. No solo se paga por menciones o claquetas sino también por determinados espacios, más de uno, en uno o más bloques comerciales de un programa específico, lo que no deja fuera a noticieros y noticiarios. Si un show empieza tarde y el que le sigue también, se pierde amplitud en bloques comerciales. Tampoco es bueno, aunque ese ya es otro tema, que en series o novelas nacionales que resultan éxito se introduzcan excesivos bloques comerciales. El reto para los canales es cumplir con su área de ventas, publicidad y marketing sin descuidar los contenidos para sus televidentes. Tampoco es dañino respetar horarios para mantener en línea los costos operativos y de producción. (O)