El mantense de 25 años obtuvo los títulos en individuales de los Futuros 1, 2, 3, los primeros de su carrera, y busca su cuarto trofeo al hilo. Ahora su mentalidad ha cambiado. Al Futuro 4 llegó con mayor confianza y trata de tomarlo paso a paso y no creer que con 3 semanas buenas lo ha conseguido todo, porque sabe que le falta un largo camino por recorrer si desea instalarse en el ‘Top 100’, su meta en el futuro cercano.

“He crecido muchísimo deportiva y mentalmente, a raíz de estos 3 títulos. Ahora me doy cuenta de lo que he alcanzado y lo asumo con responsabilidad. Al principio tenía miedo de no ganar después de todo lo que había entrenado”, comentó el tenista Gonzalo Escobar, quien participa del Torneo Futuro 4 en el Club de Tenis Buena Vista en Quito.

Su técnica y competitividad dentro de la cancha la forjó en Estados Unidos, donde estudió por 4 años en la universidad Texas Tech y obtuvo el año pasado su título en Negocios. Explicó que en el país norteamericano el deporte colegial está completamente desarrollado y la Asociación Nacional Atlética Colegial (NCAA por sus siglas en inglés) organiza muchos torneos y campeonatos y de a poco el tenis gana su espacio en este círculo.

“Todos los días se entrena de manera organizada. En Ecuador se debe pagar por un preparador físico, allá es gratis, igual el nutricionista, dentista, doctores…. Hay muchas facilidades”, confesó el manabita, quien sumó 54 puntos en el ranking ATP gracias a los 3 títulos en este mes.

En 2012, en la universidad de EE.UU., fue ‘All American’, que es el máximo premio por méritos deportivos que se les entrega a los atletas universitarios. En sus participaciones tenísticas llegó en dobles a la final de la NCAA y por un partido no pudieron ser campeones nacionales con su compañero, “eso hubiera sido grandioso”, dijo el zurdo mientras estiraba tras un partido.

Toda la vida vinculado al tenis

Gonzalo Escobar descubrió el tenis a los 6 años. De pequeño vivió con su familia en una zona alejada de Manta y en su casa había un terreno amplio donde su padre, también llamado Gonzalo, decidió montar una cancha de tenis. Él y sus hermanos, Juan de 23 años y Belén de 28, practicaron el deporte blanco de pequeños. Juan siguió sus pasos y también se graduó en una universidad de Estados Unidos gracias al tenis.

Con la serenidad que la transmite también sobre la cancha, Escobar explicó que desde los 8 años empezó a competir en torneos nacionales y fue campeón juvenil en todas la categorías: Sub-10, 12, 14 y 16. Con 16 años viajó a Miami, Estados Unidos, donde alcanzó su primer título internacional. “Fue lo máximo que gané en juveniles, el título del torneo Eddie Herr en la academia de Nick Bolletieri en Florida”.

Ese mismo año fue tercero en el mundo en Sub-16, junto a Juan Martín Paredes y Patricio Alvarado. En Juniors llegó al puesto 40 a nivel mundial, pero tuvo una fisura en su espalda por sobreentrenamiento y tuvo que parar por un año y medio.

“Ese momento fue durísimo. Estaba acostumbrado a entrenar todos los días, viajar, jugar torneos y de repente me lesioné y no pude hacer ningún esfuerzo físico”, afirmó Escobar, quien consideró que fue necesaria esa fractura para reevaluar su vida como tenista. “Fue bueno que me haya lesionado porque aprendí a valorar los momentos en los que estaba bien y a cuidarme más. Empecé a estirar después de los partidos, algo que antes no lo hacía. En ese tiempo decidí que quería obtener mi título universitario”.

Ser zurdo en el deporte blanco

Al igual que su máximo referente en el tenis, el español Rafael Nadal, Gonzalo es zurdo. Cree que algunos deportistas sí sacan provecho de esta situación, pero como en el circuito de la ATP hay cada vez más zurdos, ya no es un factor tan influyente. Los entrenadores con los que practica lo incentivan a que trate de jugar como él; y Escobar intenta imitar sus movimientos.

Aunque ya conoció a ‘Rafa’ hace 9 años en el torneo Masters 1000 de Miami, donde se tomó una fotografía con él, sería una motivación adicional enfrentarlo en un partido oficial.