A pesar de no ser un confesionario, hay quienes lo utilizan como tal. Inclusive se convierte en una especie de salón en donde no hay té, pero sí una taza. Se trata del baño, aquel espacio que muchas veces se convierte en el testigo silencioso de infidelidades, depresiones, chismeríos y un sinfín de intimidades.

Y es ese precisamente el escenario en donde se desarrolla la nueva obra teatral que el actor y director Andrés Garzón ha montado para este fin de semana en el Teatro Fedenador, a partir de las 20:00.

Cuatro mujeres cruzarán su camino al entrar al baño de una discoteca y revelarán sus vivencias, angustias, sueños, anhelo y frustraciones. Una de ellas sufre porque desea encontrar el hombre ideal; otra está deprimida porque su esposo potentado la abandonó; la tercera no puede expresar su sexualidad a los cuatro vientos y finalmente, está la testigo de cada una de estas historias que, sin que nadie lo sepa, se contagiará de esas vivencias y desnudará su alma en medio de un realismo hecho comedia.

Estas mujeres están representadas por Carolina Jaume, presentadora de televisión (programa Baila La Noche); Pamela Palacios, actriz (comedia Puro Teatro); Catherine Velasteguí (programa Vivos) y Andrea Ordóñez, directora teatral (comedia Puro Teatro), quienes se pusieron en las manos de Andrés Garzón (Pablo, en Mis adorables entenados), durante las últimas semanas para esta propuesta escénica titulada ‘Intimidades no tan íntimas’.

“Me gustó mucho esta propuesta que nació de Andrea Ordóñez, quien le pidió a la productora Carla Tacle hacer este montaje y lo acepté de inmediato porque a mí me encanta trabajar mucho con mujeres porque son más creativas”, dijo Garzón, quien hace menos de dos años dirigió la obra Las González.

Sostiene que esta obra no pretende ser una tragicomedia a pesar de la gran dosis de humor que contiene.

“La gente piensa que hacer comedia es fácil y resulta que es todo lo contrario. Solo el que ha hecho reír al público sabe lo complicado que es”, enfatiza.

Andrés Garzón está contento con el profesionalismo que han desempeñado las actrices durante las semanas de ensayo.

“Todas son muy profesionales y me gusta la entrega que tienen con este proyecto. Se les ha hecho bastante fácil y también han aportado con su ingenio”.

En ‘Intimidades no tan íntimas’, Carolina Jaume interpreta a una mujer que tiene una vida llena de excesos y libertinaje.

“Mi personaje es la de la típica ‘grilla’ de nuestro medio y expone ante los demás la vida vacía que lleva y también lo bueno que hay en ella a pesar de ser cuestionada por los demás”, comenta la presentadora de Canal Uno.

Andrea Ordóñez interpreta a la lque impia el baño y escucha a escondidas las confesiones de estas mujeres, mientras se identifica con varios de los problemas que ellas tienen en su vida.

“Hay un grupo de problemas que también son invisibilizados porque las protagonistas de estas historias son mujeres a las que muy poco las volteamos a ver. Son mujeres como cualquiera otra que también tienen sentimientos, sueños y frustraciones”, revela la artista quiteña, quien trabajó en la serie ‘El Sanduchito’, de Ecuavisa.

En esta trama no podía faltar la efeminista, personaje interpretado por Pamela Palacios, quien asegura no sentirse identificada con su papel, pero sí cree en el respeto entre mujeres.

“No hay que caer en los excesos, pero hay cosas que están ahí y pasan y no las podemos ocultar aunque quisiéramos. En esta vida hay de todo y pasa de todo. A veces nos sorprendemos de las cosas que vemos sin sentarnos a reflexionar siquiera su punto de vista”, dijo.

Catherine Velasteguí interpreta a una mujer engañada que se hunde en la depresión por no saber cómo solucionar los problemas que tiene con su esposo.

“Estas historias pueden ser muy comunes, pero no todas son iguales. A veces hay que prestarles la atención debida para entender un poco”, expresó la actriz de series cómicas.

Andrés Garzón sostiene que esta obra no es feminista, pero sí puede que “los hombres salgan un poco mal parados como en todas las reuniones y conversaciones de mujeres”, señala entre risas este actor, quien confiesa que siempre le ha llamado la atención el hecho de que las mujeres “siempre quieren ir acompañadas. Nunca pueden ir solas”.

Aclara que el humor de la obra está a la par de lo que se vive en esta sociedad y no tiene los “tonos elevados” como suele exagerarse en otras propuestas.

“No usamos las palabras graves solo por hacer reír. No es algo aislado como si fuesen una gota de agua sobre un cartón mojado. Esto es bien estudiado y tiene su momento justo y oportuno. Aquí las mujeres se despiertan y se sacuden como tienen que ser según la circunstancia en la que se encuentra en esos momentos”, agregó.

Desarrollar esta propuesta para Andrés Garzón ha sido un aprendizaje de su entorno. “Me podría sentir muy cómodo de que ellas vayan y lean al pie de la letra su libreto y ya está. Aquí pasa todo lo contrario porque me meto en esos personajes, indago y estudio su problemática y quiera o no, estoy conociendo un poco más de todo lo que rodea”.

“Me siento muy enriquecido con todo el aporte que dan a su personaje estas actrices, pues muchas veces el actor exterioriza sus vivencias a través del personaje que interpreta”, explica el histrión.

Acerca de la problemática que se muestra en la obra, Andrés Garzón aclara que se torna desafiante para él porque “contar estas historias y con humor para que el público reflexione al mismo tiempo es un trabajo muy duro que se puede lograr con dedicación, esfuerzo y con una buena propuesta”.