A las seis de la tarde Cabuki subía y bajaba de las escaleras que conducen a la segunda planta de la discoteca Solé en pleno Garzocentro, mientras los “bartenders” preparaban los tragos para los invitados. 

Arriba Cabuki, ataviado por un elegante traje oscuro a rayas y corbata roja, probaba el sonido y las luces en ese centro nocturno, mientras que en la planta baja los cuatro bailarines del grupo Safari Star ensayaban por última vez su coreografía. Los invitados empezaban a llegar al centro de diversión.

Y diversión  es lo que Navil Lértora o Cabuki, como prefiere que lo conozcan artísticamente, propone en el escenario. Su esencia es de farra, una interminable. Eso dicen sus canciones con sonido de pop electrónico y son las que forman parte de su disco Farradicto, el que presentó la tarde del pasado jueves en Solé.

Antes de las seis y media, los Safari Star y Cabuki ya estaban en el escenario delante de cuatro pequeñas pantallas que proyectaban el video de la canción Por siempre aquí. Desde una torre, el DJ suelta la pista de esa canción para que el artista guayaquileño, quien estudió música y negocios en Estados Unidos, la interprete en el escenario.

Cabuki oculta sus ojos con unas gafas oscuras que le dan un toque más farrero, de “glamour”, que contrasta con la sobriedad de su saco oscuro. Su pinta, que incluye un peinado engominado hacia atrás, se asemeja a la de un empresario. Es un “look” que revela al ejecutivo que durante el día pasa en la oficina y espera impacientemente que caiga la noche para soltar su lado farrero.

De hecho, el estribillo “baile, alcohol y sudor es lo que nos espera hoy” confirma el mensaje que Cabuki quiere transmitir en sus canciones, las que él mismo escribe, compone y arregla. Se considera, sin tapujos, un “todólogo” de su música.

Cuenta que Por siempre aquí, la canción que estrenó con su disco Farradicto, combina “una onda tropical con tintes americanizados. Eso último es porque rescato la estructura de sintetizadores que marcaron la década del 80. Es una canción con una onda brasileña y muchas saturaciones para darle fuerza”.

“La idea es que el tema gane acogida durante la temporada playera, de que se escuche tanto en las discotecas guayaquileñas como en las de los balnearios”, explica el artista, quien empezó la producción de Farradicto desde febrero de 2011. Desde entonces, creó un banco de 15 canciones, de las cuales escogió 8 para el disco, entre ellas Por siempre aquí, Tragos arriba y Una noche más. Esta última fue la primera que Cabuki lanzó hace casi un año.

“Las demás canciones que no están en el disco pueden servir para el siguiente con nuevas composiciones, pero eso es algo que todavía no está decidido”, indica.

Tragos arriba y Por siempre aquí tienen sus videos, que pueden verse en su canal del portal YouTube.

El video de Por siempre aquí se filmó durante las últimas semanas de diciembre en algunas discotecas guayaquileñas y en el balneario   Punta Centinela, según Karen Gómez, su socia en Trendline.

Juan Carlos González es el director del clip. Él relata que la preproducción tomó dos semanas, tres días de filmación con jornadas que alcanzaban las diez horas y tres días más para la edición de tomas. Según él, el concepto del video es farra, playa, sin una historia específica.

Y esas imágenes, que fueron captadas por dos cámaras, se complementan con el insinuante estribillo “mil aventuras y bronceados” que sale de la garganta de Cabuki en su canción Por siempre aquí.

Cabuki, quien tomó su nombre artístico del vocablo kabuki (arte dramático japonés), pero cambió la “k” por la “c”, ofrece en sus canciones que mezclan sonidos de congas, bajos, samplers y hasta algo oriental. Esos “tracks” son: Si la ven (Díganle), Tu noble fidelidad, Sweet Vendetta, Miss K y Mi nena preferida, que conducen a una farra sin fin.