La pasión que siente desde niño por tocar el violín es lo que ha impulsado al ecuatoriano Alejandro Jiménez a ser persistente en sus estudios musicales y recorrer varios países para fortalecer sus conocimientos.

Hace cuatros años y medio tomó la decisión de viajar a Francia para continuar sus estudios. Durante ese tiempo tuvo la oportunidad de conocer y compartir el escenario con grandes músicos. Tres de estos artistas se unieron a Alejandro para apoyarlo en el ‘Encuentro franco-ecuatoriano’, proyecto musical de enseñanza que el ecuatoriano desarrolló en Quito, Imbabura y Esmeraldas, entre el 14 y 29 de agosto pasado. 

Los músicos franceses Gilles Lefreve (violinista), Lys Nordet (canto) y Beatrice Hindley (piano) fueron quienes los acompañaron en el recorrido de esta iniciativa, que tuvo como objetivo unir las experiencias y compartir los saberes de músicos ecuatorianos y franceses, por lo que se desarrollaron clases magistrales y conciertos en distintas ciudades.

Para cumplir con esta meta, Alejandro contó con el apoyo del Ministerio de Cultura del Ecuador, la Alianza Francesa, la Asociación Humboldt, la Casa de la Cultura Ecuatoriana, el Municipio de Otavalo, la Asociación de Intercambio Musical y Artístico Internacional (EMAI), y el Conservatorio Municipal de Esmeraldas. 

Una vez finalizado este Encuentro, el violinista quiteño se siente satisfecho por los logros alcanzados y pretende desarrollar este proyecto de forma anual. “Mi idea de hacer este Encuentro nació porque en Ecuador falta mucho de violines, arcos, partituras, en cuanto a la música clásica. El objetivo con estas clases es que se creen puentes para que profesores de afuera vengan al país o jóvenes que se vayan a Europa a estudiar violín”, indicó Jiménez.

Tras la experiencia ganada con los eventos, en los que participaron alrededor de cien alumnos, el próximo paso que el artista, de 24 años, quiere lograr es crear una escuela de violín a nivel nacional para que los jóvenes ecuatorianos se beneficien. “Trabajaría en un principio con músicos de la provincia de Esmeraldas porque hace 3 años se creó allá un conservatorio musical y los músicos franceses que me colaboraron se quedaron contentos con todo lo que vieron. Por el momento pienso quedarme unos tres años más en Francia, y al volver al país espero trabajar en esto y hacer una sede de la escuela en el centro y al norte del país”, dijo.

Alejandro aún recuerda cuando tenía 8 años y comenzó sus estudios en el Conservatorio Nacional de Ecuador, en 1995. Seis años más tarde, en 2001, recibió el título de Bachiller Técnico Musical en la especialización de violín en el Conservatorio Salvador Bustamante Celi, de la ciudad de Loja. “Cuando cumplí los 18 años quise perfeccionarme y decidí viajar a Venezuela, en donde estuve un año”, indicó el artista.

A ese país llegó en 2006, en donde continuó sus estudios de violín en el conservatorio Simón Bolívar de Caracas, Venezuela. Al concluir sus clases viajó a Francia para estudiar en el conservatorio Paul Dukas de París, Gennevilliers y Departamental de la ciudad de Evreux. Durante esos años de estudio tuvo destacados profesores violinistas, tanto ecuatorianos, como latinoamericanos y franceses. Entre los que se destaca José Francisco del Castillo y Gilles Lefevre.

En el conservatorio de Gennevilliers, en París, obtuvo el premio en el ciclo superior de violín. En 1998 formó parte del Coro Infantil del Conservatorio Nacional de Música como Soprano I, con presentaciones diversas y la grabación del CD ‘Desde los Andes al Mundo’.

Como violinista ha sido parte de las orquestas: Infantil de Cuerdas del Conservatorio Nacional de Música (1999); concertino de la Sinfónica Infantil del Ecuador (2001), solista e integrante del Conservatorio Salvador Bustamante Celi (2000), Sinfónica Juvenil del Ecuador, bajo la dirección de Patricio Aizaga (2002-2005). A más de sus presentaciones a nivel nacional, también se destacan sus conciertos en escenarios europeos, en París, Berlín, Bremen y Potsdam en 2003.

En 2005 se presentó con la Orquesta Sinfónica de Jóvenes Latinoamericanos y de la Orquesta Sinfónica CAF (Corporación Andina de Fomento) de Juventudes de los Países Andinos, bajo la dirección de Gustavo Dudamel. En 2008 con la Orquesta Moderna de París, con Alejandro Sandler como director. En 2010 junto a la Orquesta de la Ciudad Universitaria (París). En 2008 y 2011, con la Orquesta du Centre Philarmonic (sur de Francia).

Perfeccionó sus estudios en 2006 y 2007 en la Academia Latinoamericana de Violín con maestros como José Francisco del Castillo y Sergio Celis en Mérida, Venezuela. Además estuvo presente en el Festival de Musicalta en Roufach-Alsace y en el Festival Internacional de Música Universitaria en Belfort (2008).

En 2008 y 2009 se unió al cartel del ‘Festival en Morvan’ con el violinista Régis Pasquier. En 2009 participó en el ‘Festival de la voz’ en Quentin (Côtes d’Armor, Francia) y en el Festival ‘Valdres Music Festival’ en Fagernes (Noruega) con el violinista Detlef Hahn.

En 2010, 2011 y 2012 participó en el festival Les Promenades de la Louvesc en Ardèche (Francia). “Este gusto por el violín nació por mi padre que le gusta la música clásica y me puso en el Conservatorio Nacional. Mis padres siempre me han apoyado, y en el Encuentro que realicé en el país estuvieron atrás de todo, pendientes de cada cosa”, manifestó.

Pero a más de mostrar sobre el escenario lo aprendido en los distintos conservatorios, Alejandro ha compartido con otras personas su enseñanza, por lo que laboró como docente de violín en Quito entre 2005 y 2006, de igual manera en la Escuela Fesnojiv en Caracas (2006-2007), en el Conservatorio Departamental de la ciudad de Evreux (2008-2009), en el Centre d’Animation Censier en París (2011) y en la Institución Allegro Musique París-Francia (2009-2011).