¿Sabía que las macuquinas fueron las primeras monedas del Ecuador?
¿Sabía usted que el primer sucre circuló en 1884 durante el régimen del presidente Plácido Caamaño y qué el Padre Julio María Matovelle fue quién propuso que se plasme el perfil del mariscal Antonio José de Sucre en esta moneda?
Hay muchos datos curiosos y novedosos que la ciudadanía puede conocer si recorre el Museo Numismático del Banco Central del Ecuador, que está ubicado en las calles García Moreno y Sucre, frente a la Iglesia de La Compañía (Centro Histórico de Quito).
El museo, en sus inicios, fue una locación de estilo neoclásico adquirida por un banco privado, pero nunca fue usada. Fue construido en 1916 por el arquitecto Francisco Durini Cáceres; sin embargo, el proyecto concluyó en 1924. El gobierno de Isidro Ayora compró la edificación recién en 1927 y ese 10 de agosto empezó a funcionar. En ese lugar estuvo hasta 1968, cuando se trasladó a su actual sede, ubicada en el sector de La Alameda (centro norte de la capital).
Las instalaciones del Museo Numismático se distinguen por su diseño de sendos pilares, graderíos marmolizados y corredores con imitación de piedra. "Este escenario envuelve el proceso evolutivo de la moneda en el Ecuador", detalló Eladio Rivadulla, curador del Banco Central. La numismática es una ciencia auxiliar de la Arqueología que trata del estudio de las monedas y medallas y hay varios especialistas en el Ecuador.
Quien visite este espacio podrá conocer alrededor de 2.000 piezas, que detallan desde los sistemas de intercambio o trueque estructurado por las sociedades aborígenes prehispánicas.
A decir de Rivadulla, varios hallazgos arqueológicos en el Ecuador determinaron que antiguamente se usaba unas pequeñas hachas de metal, que en su momento fueron usadas como moneda. Principalmente se emplearon en El Oro, Manabí, Guayas, Los Ríos, donde se asentaron las culturas Manteño Huancavilca y Milagro (800 a 1.500 d.C).
En esta época también se intercambiaban productos y objetos como piedras, plumas de colores, semillas de cacao, fragmentos de obsidiana y hasta pieles de animales.
Las primeras monedas elaboradas
En las salas del Museo constan ejemplares de piezas de La Colonia, entre ellas se encuentran las macuquinas, que fueron las primeras monedas en acuñar (elaborar) en América. Estas se confeccionaban con golpes de martillo. Sin embargo eran conocidas por su mala calidad, lo que hizo que fueran fáciles de falsificar.
Luego se conoció la moneda Columnaria, que tenían mejor calidad que la macuquina, ya que contaban con un cordón de seguridad en cadena que dificultaba su falsificación.
Después se acuñó en plata la moneda de busto. Esta pieza fue una de las unidades monetarias que más se usó en la Colonia e incluso durante los primeros años de la Independencia.
Luego llegó la 'moneda pelucona' debido a que uno de sus lados estaba la imagen del Rey de España con una peluca; en este caso el Rey Carlos III. Además, la moneda era elaborada con oro.
En 1.822, luego de que Ecuador alcanzara su independencia y sea incorporada a Colombia y Venezuela, se emplearon las monedas denominadas reales. Luego, entre el período comprendido entre 1856 y 1861 se emplearon los francos.
También hay las fichas o monedas de hacienda, cuyo modelo económico fue generado por la producción cacaotera y se las empleaba para pagar a sus trabajadores, quienes fueron obligados a utilizarlas en la 'Tienda de Raya' (centro de abastos particulares que eran propiedad del hacendado).
Todos estos instrumentos de pago abordan el proceso evolutivo ocurrido durante el período colonial, la etapa republicana y el surgimiento de la Casa de la Moneda de Quito (la primera institución económica formal del país). También habla sobre la emisión de billetes de diferentes bancos hasta la consolidación del Banco Central del Ecuador.
En esta última entidad, la circulación de billetes inició en 1928. Los primeros diseños conservaron las características de los billetes de bancos particulares con figuras femeninas de la mitología.
La evolución de la moneda ecuatoriana
La evolución continuó. A mediados del siglo XX, el Banco Central emitió moneda billete con imágenes de figuras emblemáticas del país. Entre estas, la efigie de Juan Montalvo y Eloy Alfaro.
Pero, antes de los billetes llegaron los reales de plata entre 1846 y 1852.
El sucre y sus primeras formas
En Ecuador, antes de que circule el dólar en el 2000, la unidad monetaria nacional fue el sucre que se puso en vigencia en 1884. Un dólar equivalía a 100 centavos de sucres. Fue acuñada por casas monetarias de Lima, Birmingham Heaton de Inglaterra, Santiago de Chile y Filadelfia. El sucre, en sus inicios, fue fabricado en plata pura. De ahí nació la expresión popular de "no tengo plata", que usaba una persona cuando no tenía dinero. Cada sucre pesaba una onza de plata y su valor era de un dólar.
Con el tiempo, el metálico disminuyó su tamaño y evolucionó su material. Fue cuando se usó acero, níquel, aluminio, entre otros materiales, para fabricarlos.
La impresión de los visitantes
Algunos de los visitantes que concurrieron a este espacio, se sintieron fascinados por conocer los secretos del lugar numismático. Rogelio Méndez llegó al lugar desde Ibarra para pasar las vacaciones con su hijo. Juntos comentaron que les gustó conocer que una pieza de 1838 que fue acuñada en Quito, aparece en la película Moby Dick, de Gregory Peck.
"Es una forma de conocer otro ángulo de nuestra historia. Es bonito encontrar estos espacios", comentó el hombre.
Cecilia Ortega, otra de las visitantes, se sintió fascinada por la máquina acuñadora con la que se elaboraban las piezas monetarias. También dijo que le gustó la decoración de la bóveda de la moneda. Se trató de una enorme caja fuerte de la época, en donde se almacenaron lingotes de oro. Ahí se encuentras bolsas con monedas y fajos de billetes de sucres.
Horarios de atención
El público puede acudir de martes a viernes, de 09:00 a 16:00; los sábados, domingos y festivos de 10:00 a 16:00. Por el feriado del 10 de Agosto, la atención será hasta las 21:00.
La entrada es gratuita para los visitantes nacionales; para los turistas extranjeros, $ 1; para adultos; $0,50 para personas de la tercera edad y estudiantes con carné y $ 0,25 para menores de edad. (I)
