La indumentaria deportiva quedó de lado, al igual que el gramado y la pelota. En su lugar 4 jugadores argentinos que militan en el balompié profesional ecuatoriano lucieron delantales y cucharas en mano.

El escenario fue un hotel de Quito y la cancha una pequeña cocina. Fue un partido gastronómico en el que los 'albicelestes' mostraron sus habilidades para poner la sazón en la elaboración de la fanesca que enfrentó a representantes de Universidad Católica y Aucas.

Miguel Escalada y Juan Pablo Caffa por el "Trencito Azul"; Esteban Solari y Horacio Salaberry por los "orientales".

La estrategia estuvo definida previamente por los chefs profesionales que alistaron todos los ingredientes para que los especialistas del balón pongan su toque en la preparación y presentación del tradicional plato ecuatoriano.

Caffa y Solari fueron los encargados de iniciar la preparación y sofreir la cebolla, cada uno en su equipo. Fueron hábiles meciendo la cocción para evitar que esta se queme; mientras sus compañeros pelaron los chochos.

Solari fue el único que llevó barra propia, sus tres hijos (Sol, Luna y León), desde el borde de la mesa observaron todos los movimientos de su padre y constantemente interrogaron sobre la preparación. Solari no tuvo inconvenientes para agregar cada uno de los granos, esperar que la cocción tenga consistencia y esté en su punto.

"Es la primera vez que pruebo este plato ecuatoriano y la verdad me gustó. Mi esposa me prepara siempre platillos con granos por lo que no tengo problema con la fanesca", reiteró Solari.

Mientras esto se conseguía afloraron los nervios en cada jugador. Hasta gotas de algo de sudor se evidenciaron. "Es un partido muy difícil, más que cualquier otro", comentó Escalada al tiempo de reconocer que no es muy hábil en el aspecto culinario. "Prefirio mil veces la cancha, eso es lo mío", reconoció el delantero que lleva más de 5 años en el país, pero que solo hace 2 semanas pudo saborear por primera vez una fanesca.

"Antes no tuve oportunidad de hacerlo por distintos aspectos, pero el domingo que lo hice me gustó mucho. Es un sabor bastante agradable que también le agradó a mi esposa".

En los minutos finales de la preparación, los 4 participantes aceleraron su pulso y su técnica en decoración para impresionar al público con la presentación del plato de fanesca, sobre todo a la reina de Quito, Angie Vergara, quien era parte del jurado. 

Los adornos que los platos de fanesca lucieron llamaron la atención de los presentes y sobre todo de Angie, la reina que al saborear cada bocado reveló en su rostro lo apetitosas de las preparaciones. "Ambas están exquisitas y muy sabrosas", indicó.

Ese dictamen fue unánime por lo que todos los participantes llevaron sus premios y los presentes disfrutaron del tradicional plato con el que se conmemora la cuaresma.

Los 4 argentinos confesaron que les agradó la fanesca y reconocieron que en su país no hay ningún plato que identifique la semana santa. "Ustedes saben que para todo argentino la debilidad es el asado y de eso nos privamos en esta celebración. No comemos nada que tenga carne", refirió Caffa. (I)