Los requerimientos de las mujeres para lucir bien siempre han sido en todo ámbito. Destacar su figura con distinción está dentro de sus objetivos y para ello toma en cuenta cada detalle, como escoger un buen traje de baño para disfrutar del mar, el río o de la piscina.

Para Tatiana Cotera, una joven diseñadora de estos outfit (vestimenta) y a la vez comerciante online con su tienda Avocat Bikinis (presente en redes sociales), la moda en 2018 es de trajes enterizos (una sola pieza). Van abiertos adelante y atrás teniendo como colores favoritos el turquesa, el negro y el fucsia. Pero también están los balos (de dos piezas) que se mantienen vigentes. Las manabitas gustan mucho de estos trajes y son muy exigentes a la hora de exhibirlos, comenta.

“Los enterizos estilizan la figura femenina y quedan bien en todo tipo de cuerpo”. Los trajes que ella elabora son tejidos a mano, con precios más altos por los detalles exclusivos, pero cuando su clienta quiere uno de licra o similares hace los pedidos en el exterior (exclusivamente en Suiza). Sus costos fluctúan entre los $ 15 y $ 30. Hay un sinfín de modelos de esta pieza que van al gusto de la cliente.

Según el portal www.infobae.com, en los 90, uno de los diseños más buscados eran los enterizos que fueron popularizados por Pamela Anderson, en la serie Baywatch y que hoy han vuelto con fuerza en esta temporada.

La portovejense Malú Mieles está atenta a la moda y en este invierno no dudó en adquirir un enterizo. “Esos se han impuesto con estampados, son súper rebajados adelante y atrás, bien finos. Me encantan”. De estos, asegura, que marcan más la figura. “Me considero una sirena al encantarme el mar, aquel gusto debe ir de la mano al exhibir una buena ropa de baño”.

Adquirió, hace poco, uno de color verde combinado con fucsia que lleva un toque como de hojas. Lo compró en un centro comercial de Guayaquil en $ 60 y lo ha lucido en este feriado de Semana Santa.

Asegura que luego de los enterizos le siguen los de dos piezas y en tercer lugar los de tres piezas que incluyen un short o falda.

Lesly Calderón, una quiteña de esbelta figura que visita los balnearios de la Costa como Manta, explica que lo atractivo de los enterizos es que la espalda la deja al descubierto, claro eso dependiendo del modelo. “Yo siempre trato de estar en boga”.

Para Génesis Tapia, de Santo Domingo y una amante de los balnearios manabitas, los trajes de baño de una pieza afinan la figura, lo que hace que sean los preferidos a la hora de comprar. Se acostumbró a adquirir esta vestimenta de playa por internet porque los precios son módicos. “Van desde los $ 20”.

La durabilidad de esta pieza de baño depende de su dueña. Es mejor lavarla a mano que introducirla en una lavadora o secadora. (I)