Una de las parroquias rurales más antiguas de la provincia de El Oro se encuentra en el cantón Santa Rosa. Se trata de la isla Costa Rica, perteneciente al Archipiélago de Jambelí, que fue la primera en poblarse hace más de 125 años.

Sus habitantes viven de la pesca y la recolección de conchas. Persiste entre ellos la tradición de criar el molusco en corrales frente a su viviendas. Una de las curiosidades de este lugar es que algunos de sus pobladores llegan a vivir hasta 100 años.

Son justamente los mayores quienes antes de caer la noche, cuentan leyendas. Los moradores recuerdan que frente a la isla se situaba San Gregorio, un pueblo que hoy no existe y que según las historias se perdió porque un ‘curita’ lo maldijo. El relato de los comuneros destaca que el sacerdote les echó la maldición por haberse portado mal. La gente comenzó a irse del lugar y ahora no queda nada, solo una playa extensa y deshabitada desde donde se puede divisar la costa del vecino país, Perú.

La actividad de “conchar”

Cuando la marea está baja los concheros se ponen botas de caucho, se protegen del sol con una camiseta en la cabeza e ingresan al manglar. Meten sus brazos en el lodo y rastrean con sus manos en busca de conchas.

Los comuneros son expertos y conocen cada rincón del manglar. Ellos recolectan al ‘tanteo’ las conchas prietas y las depositan en una bolsa hecha de nylon a la que la conocen como shicra. Al finalizar la tarea salen a vender los moluscos en el sector de Hualtaco, lugar cercano a Huaquillas.

Actualmente en la isla Costa Rica habitan 84 familias, más o menos 500 personas. Los comuneros se han asociado para reclamar lo que por ley les pertenece: la protección del manglar como medio de supervivencia ante la tala de algunas camaroneras que se han asentado en las inmediaciones. Aunque actualmente estos negocios ya protegen la flora nativa y colaboran con las comunidades del archipiélago en la reforestación del ecosistema manglar.

Desde hace 15 años la comuna tiene bajo su custodia 520 hectáreas de manglar, hábitat de los moluscos. En este sector de ElOro se cosecha la concha durante un período de 3 meses , según explicó Miguel Cruz, presidente de la Junta Parroquial. “La recogemos grandecita para llevarla al mercado”, explica Cruz.

El desplazamiento

Por el año de 1960, Costa Rica era la isla más poblada del Archipiélago de Jambelí, con casi 1.500 habitantes. Sin embargo, por el boom bananero y camaronero en aquel tiempo, la mayoría de los hombres se desplazaron hasta Puerto Bolívar y Santa Rosa, donde había plazas de trabajo por el incremento del embarque de banano.

Con el pasar de los años, las esposas y niños también salieron de la isla. Quedaron únicamente los adultos mayores. En el año 1985 la isla se quedó con tan solo 40 habitantes, las casas fueron puestas en venta y el pueblo prácticamente se convirtió en un sector deshabitado. Pese a esto, la población fue creciendo de a poco. Ya para el año 1995 la isla estaba siendo repoblada. Actualmente hay 84 familias (500 personas). La mayoría con lazos de parentesco.

Los habitantes están ubicados en lo que ahora se llama el nuevo pueblo. De la antigua parroquia solo queda la iglesia que ha sido reconstruida, el resto de las edificaciones son vestigios de lo que fueron en sus tiempos de gloria allá por la década del cincuenta.

Costa Rica se divide en 3 sectores: el barrio 9 de Octubre, el Central y el barrio Edgar Córdova, también conocido como la zona vieja. Todos los habitantes se conocen e incluso se cuidan para evitar cualquier perjuicio que se pueda registrar en los hogares.

Cómo llegar hasta la isla

Para llegar a la isla de Costa Rica se toma una lancha en el puerto de Hualtaco-Huaquillas, sector colindante con Perú.

Durante el recorrido de aproximadamente 40 minutos, se puede notar que del lado peruano, los manglares se muestran intactos y con una gran fauna y flora; mientras que del lado ecuatoriano el paisaje ha sido alterado con varias camaroneras. Los comuneros del archipiélago, sin embargo, han luchado por años en contra de la tala de los manglares.

La otra forma de llegar es desde Puerto Bolívar, aunque este viaje dura 01h45.

Según la historia registrada por el Municipio de Santa Rosa, existe una hipótesis del por qué del nombre Cosa Rica. Este se habría dado porque al ser frontera marítima, era un lugar de paso para los barcos que cruzaban el Océano Pacífico. Llegaba aquí a descansar gente de otros lugares, entre ellos de Costa Rica. La isla en realidad se llamaba Tembleque.