A más de los monumentos, avenidas e instituciones educativas que llevan los nombres de los libertadores de Latacunga, Riobamba, Guaranda, Machachi y Ambato en cada una de estas ciudades, existe un lugar en la Sierra centro que guarda un significado profundo para estas localidades.

Se trata de la Hacienda Tilipulo, ubicada al occidente y a 15 minutos de la capital cotopaxense, lugar donde hace casi 2 siglos se reunieron las huestes libertarias de estas ciudades.

Además, la finca sirvió como cuartel estratégico donde preparó el Primer Grito de la Independencia, del 10 de agosto de 1809, en Quito.

El rancho fue construido en 1720 por el jesuita Marcos Guerra, con la ayuda de hábiles maestros de la época.

Según la historia, entre los primeros dueños están Sancho Jacho Pullupaxi, cacique de Saquisilí, y Sancho Jacho de Velasco.

Posteriormente, la Compañía de Jesús compraría la propiedad y construyó el Monasterio de San Juan Bautista, donde los monjes rezaban y adoraban a este santo que, es hasta hoy el patrono mayor de la comunidad.

Lugar de esparcimiento

Daniel Herrera, guardián y jardinero del lugar, manifiesta que las casi 80 hectáreas fueron adecuadas como un espacio ‘bifuncional’.

“Inicialmente las 2 alas que la componen estaban destinadas a ser obrajes. Por mucho tiempo fue usada con este fin y su producción se destacó por la calidad de textiles que allí se manufacturaban.

Después, se constituyó en lugar de esparcimiento para personajes importantes de los gobiernos de turno, ya que en el predio había caballos, veraniegos jardines y explanada para realizar eventos, entre otras actividades”, dijo.

Por esos mismos tiempos y por orden de García Moreno, se plantó en el patio trasero un árbol de eucalipto aromático, que hasta la actualidad permanece en el lugar.

Diseño intacto

Hoy en día, la propiedad conserva su diseño original que data de hace 294 años. La entrada es libre.

El cerramiento de la casa, que ocupa un 30% de toda la propiedad, es el mismo.

En el extenso patio que precede a la vivienda se han habilitado canchas de fútbol y básquet.

En el interior se encuentra uno de los jardines más grandes de la hacienda, donde hay 6 variedades de orquídeas y rosas.

El reloj solar sigue funcionando en el patio central. Todos los pasillos de la hacienda conservan las pilastras de diseño grecorromano.

Al avanzar un poco más, se puede observar el Monasterio de San Juan Bautista que guarda arte religioso de hace varias décadas. Las piezas están en dos galerías.

El pozo de la hacienda es el lugar más visitado por los turistas.

Datos

Los turistas que deseen visitar la Hacienda Tilipulo deben sacar un permiso en el Departamento de Cultura del Municipio de Latacunga. La entrada es libre.

La distancia desde la ciudad hasta esta finca es de 8 kilómetros. Al no existir una línea de autobús que lleve al rancho, el servicio de taxi es la única alternativa, aunque el valor de la carrera es de $ 5.

En las afueras de la residencia, se pueden realizar paseos a campo abierto, gracias a las 4 caminos habilitadas. Los lugareños aprovechan el pastizal del lugar y llevan el ganado vacuno a diario.

No existe restricción alguna en todo el recinto para hacer fotos. El atrio de la iglesia es el único lugar que permanece cerrado.