Una inspección realizada por la Unidad de Bienestar Animal (UBA), en coordinación con la Agencia Metropolitana de Control, dejó al descubierto un presunto caso de explotación y cría ilegal de caninos en el barrio La Armenia, al suroriente de Quito.

Durante el operativo, los inspectores hallaron dos perros adultos y dos cachorros alojados en una tina, un espacio frío, duro y completamente inadecuado para su bienestar. El entorno evidenciaba falta de cuidado, higiene y condiciones mínimas de protección, lo que alertó a las autoridades sobre un posible caso de venta ilegal y reproducción no controlada.

Uno de los hallazgos más preocupantes fue el estado de salud de una perra adulta, que presentaba lesiones visibles en las glándulas mamarias, indicios claros del desgaste físico por partos reiterados sin control veterinario. Ninguno de los cuatro animales tenía registro de vacunación ni había sido esterilizado, lo que agrava la situación sanitaria.

Las personas que se encontraban en el sitio alegaron que los animales pertenecían a un familiar, pero no pudieron presentar ningún documento que demuestre una tenencia responsable, como exige la normativa municipal. Ante esto, la UBA levantó un informe que derivará en una nueva inspección y posible sanción por parte de la Agencia Metropolitana de Control.

Según la Ordenanza Municipal 095, la venta ilegal de animales de compañía en Quito es considerada una infracción muy grave y puede ser sancionada con multas de hasta USD 4.700. Estas prácticas no solo fomentan el maltrato animal, sino que también ponen en riesgo la salud y la vida de los animales, especialmente de las hembras utilizadas en ciclos de cría constantes.

Como medida inmediata, los cuatro perros fueron trasladados a los Centros de Atención Veterinaria, Rescate y Acogida Temporal (CAVRAT) de la UBA, donde recibirán atención médica y emocional mientras avanza el proceso administrativo.

Las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía para que reflexione sobre la tenencia responsable, que incluye la esterilización, vacunación, espacios seguros y adecuados, y el rechazo total a prácticas de explotación. La vida y bienestar de los animales depende del compromiso ético y legal de sus cuidadores.

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— El Telégrafo Ecuador (@el_telegrafo) June 14, 2025