El botar papeles, chiclets, desperdicios  o escupir en el Centro Histórico de Quito puede costar hasta 584 dólares de multa.
Una ordenanza municipal lo regula, está en vigencia y la hacen cumplir policías vestidos de verde, que circulan por el Casco Colonial.

“Existe mucha gente que circula a pie y arroja desperdicios en el piso”, confirmó Nataly Mora, oficial de la Policía Metropolitana.

Alexandra Morales es una ciudadana que recibió una infracción de primera clase. Su hijo de 8 años arrojó un papel de caramelo en la calle Guayaquil y Chile. Un policía Metropolitano llamó la atención de la mujer y le pidió su número de cédula. Con el documento en mano llenó la citación para que sea entregada en la Comisaría Municipal, donde se hace efectivo el pago.

La sorpresa para Alexandra fue tal que reprendió a su hijo, aunque aclaró que la norma es muy poco difundida, pero que obliga a los padres a tener mayor cuidado.

Sesenta policías metropolitanos, identificados con un chaleco verde, recorren las calles del Centro Histórico vigilando que la ciudadanía no arroje desperdicios a la vía pública. Los infractores reciben citaciones y  multas que van desde  58,40 hasta 584 dólares. En este mes existen 257 infractores.

Las acciones están  coordinadas por la Agencia Metropolitana de Control, con la participación de la Empresa Pública Metropolitana de Aseo (Emaseo), Secretaría de Ambiente, Administraciones Zonales y comisarios de Ambiente y Salud.

Datos proporcionados por la Comisaría Ambiental de la Zona centro, indican que en los 17 primeros días del año existen 257 infractores que recibieron su amonestación valorada en 58,40  dólares por botar basura o escupir en las calles del Casco Colonial. 

Los policías con chalecos verdes caminan por todo el centro de la ciudad cuidando que se preserve el orden y la limpieza.

Los  agentes de control se basan en la Ordenanza Municipal 332 de “Gestión Integral de Residuos Sólidos del Distrito Metropolitano de Quito”, para levantar las multas dependiendo el caso. La norma establece multas que van desde: $ 58,40 para las de primera clase, $ 146 para las de segunda y $ 584 para las de tercera. El reglamento determina tres tipos básicos de contravenciones, dependiendo de la gravedad del hecho.

De primera clase se sanciona con 58,40 dólares por escupir, lanzar papeles, orinar y arrojar a la vía pública desperdicios y   el tener sucia y descuidada la acera del frente de su domicilio, negocio o empresa. Estas son las más comunes. 

Las sanciones de segunda clase son de 146 dólares y se aplican a quienes quemen basura   a cielo abierto, papeles, envases; no disponer de un basurero plástico dentro de los vehículos de transporte; ocupar el espacio público con materiales de construcción y escombros.

Y las de tercera clase, con 584 dólares, abarcan: abandonar desperdicios  hospitalarios o peligrosos en quebradas, quemar llantas o cualquier otro material en la vía pública urbana; mezclar los residuos domésticos con residuos tóxicos.

Entre abril y diciembre de 2011, la Policía de Ambiente emitió un total de 6.831 contravenciones.

De la producción total de basura que se genera en el Distrito Metropolitano de Quito (100 toneladas/día), un 10% se recoge de las calles.

Ilioska Guayasamín, administradora de la Zona Centro, indicó que en cada evento que se realiza en el Casco Colonial se informa sobre las nuevas normas que rigen en Quito.