Dentro de las 8 páginas que contemplan el plan de gobierno del Partido Sociedad Patriótica (PSP), solo 4 de ellas tratan sobre las propuestas puntuales de trabajo que propone el binomio Patricio Zuquilanda-Johnnie Jorgge; las restantes 4 abarcan la introducción de este folleto.

Para Patricio Zuquilanda, candidato a Presidente, este plan de gobierno deja de lado algunos temas transcendentales, como tercera edad o salud, porque se trata de “una cosa resumida” de su gran propuesta que tiene la función de cumplir con los requisitos burocráticos de su candidatura, como lo dijo en entrevista con EL TELÉGRAFO el 13 de diciembre pasado.

¿Qué dicen expertos respecto al plan del PSP?

Víctor Hugo Jaramillo, analista político ambateño, sostiene que las propuestas de campaña de PSP son inviables, debido a que no explica de forma clara los mecanismos concretos que utilizarán para llevarlas adelante.

Según Jaramillo, quien se dedicó a la docencia universitaria por más de 30 años en Ambato,  además, hay dos grandes contradicciones en este plan de gobierno, el cual el mismo Zuquilanda lo ha catalogado que está resumido en cuatro ejes.

“Por una parte, en el aspecto económico, Zuquilanda dice que suprimirá las empresas públicas que, según él, están demás, con lo cual enviará a sus casas a miles de jóvenes que allí laboran. Sin embargo, en su propuesta social afirma que creará empleos en instituciones gubernamentales. Otra incoherencia es querer fomentar la libertad de expresión, cosa que ahora mismo existe, y a la vez ofrecer reestructurar la Ley de Comunicación, la cual no limita la labor de comunicadores, pero sí regula ciertas anomalías que se han dado en décadas anteriores por parte de algunos medios que atienden a intereses de ciertos sectores”, agregó el docente.

En cuanto al ofrecimiento de reformar otras leyes, como la del Agua y Drogas, en el área judicial de la propuesta electoral, Jaramillo explicó que esto limitará los derechos de los ecuatorianos para favorecer nuevamente a grupos poderosos que desean privatizar ciertos sectores y servicios que hoy son gratuitos.

Por otra parte, para Santiago Basabe, experto en Politología e Investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), los planes de gobierno “no sirven para absolutamente nada”, pues su existencia solamente respondería a un requisito formal del Consejo Nacional Electoral (CNE) y, por lo tanto, “no tienen ninguna validez práctica”.

Sobre los programas de gobierno en general, dijo que las propuestas que aparecen en los planes de los diferentes movimientos y partidos políticos no tienen diferencias profundas. Al contrario, se parecen tanto que algunos deciden ser más específicos ocupando un gran espacio, mientras otros más concisos ocupando 4 u 8 páginas, “porque es una cuestión de forma [...] no hay ciudadano sobre la faz de la Tierra, o al menos de este país, que los revise, analice o coteje”.

En específico, sobre el plan del PSP, dijo que busca complacer a todos los sectores de la ciudadanía, con propuestas para cada uno de ellos que, incluso, halla contradicción entre un tema y otro. “Creo que es, lo que en la literatura se conoce, partidos atrapatodos -su palabra científica es CatchAll- que son partidos estrictamente electorales que buscan capturar votos en cualquier sector de la sociedad, [...] tienen que apelar a un discurso súper amplio, súper omniabarcador para que puedan capturar”. (I)