El departamento estadounidense de Justicia y la Embajada de Ecuador firmaron el viernes en Washington un inédito memorando de entendimiento que establece mecanismos para proteger a trabajadores inmigrantes de discriminación en el mercado laboral.

El documento, firmado en la sede diplomática ecuatoriana en Washington, determina las instancias que trabajadores extranjeros que sufran discriminación laboral puedan utilizar para encaminar las denuncias vía la División de Derechos Civiles del departamento de Justicia.

Se trata del primer acuerdo de este tipo firmado por el departamento de Justicia con un gobierno extranjero, aunque esa cartera negocia entendimientos semejantes con otros dos países, que no fueron identificados.

"Es una ceremonia histórica para el departamento de Justicia", dijo Vanita Gupta, responsable por la División de Derechos Civiles, para quien el acuerdo permite a trabajadores ecuatorianos en Estados Unidos beneficiarse de un "ambiente laboral libre de discriminación".

Con el documento, los ecuatorianos que vivan legalmente en Estados Unidos tienen un instrumento legal para saber si son "víctimas de discriminación laboral basada en su condición migratoria".

De acuerdo con Gupta, su oficina descubre frecuentemente "empresas que discriminan a inmigrantes legales rechazando darles empleo o exigiendo a esas personas documentos innecesarios", y la idea del acuerdo es tener una herramienta para evitar y enfrentar los casos.

Fuentes de la embajada ecuatoriana estiman que el mecanismo antidiscriminación beneficiará a más de medio millón de personas de esa nacionalidad en Estados Unidos.

El acuerdo, según un comunicado de la Cancillería ecuatoriana, promueve el acceso a la información y orientación sobre los derechos de inmigrantes ecuatorianos con cualquier forma de autorización de trabajo.
De esta forma los inmigrantes ecuatorianos podrán verificar si ellos o sus compatriotas han sido víctimas de discriminación laboral basada en su condición migratoria por medio de recursos que existen para prevenir estas prácticas.

El embajador del Ecuador en Estados Unidos, Francisco Borja Cevallos, manifestó que “estos acuerdos son vitales para asegurar que la comunidad ecuatoriana en Estados Unidos esté informada sobre sus derechos y los diferentes recursos que el Departamento de Justicia ofrece a través de sus oficinas y líneas de ayudas, así como sobre la ayuda que la embajada ecuatoriana y los consulados pueden proveer para asegurar que los derechos de los inmigrantes ecuatorianos sean respetados”.

El Departamento de Justicia, a través de la Oficina del Consejero Especial sobre Prácticas Injustas en el Empleo Relacionadas con la Condición del Inmigrante, se enfoca en difundir información que ayuda a las personas a identificar cuando un empleador comete discriminación basada en condición migratoria o nacionalidad, así como abusos en la verificación de documentos e información.

El personal de la Oficina del Consejero Especial (que cuenta con intérpretes de varios idiomas) puede ayudar a los trabajadores llamando a los empleadores para explicar las prácticas apropiadas de verificación y, cuando sea necesario, puede distribuir a los trabajadores formularios para documentar cargos de discriminación.

Ecuador y Estados Unidos han mejorado sus relaciones diplomáticas desde la expulsión de sus embajadores en abril de 2011 por revelaciones de WikiLeaks. (I)