Samia Álava es una deportista multifacética. Con tan solo 16 años, integra la selección ecuatoriana absoluta de patinaje artístico, es seleccionada de atletismo en el Colegio Panamericano y practica vóleibol como hobby.

Es velocista. Su especialidad son los 100 metros planos, aunque también hace salto largo. El deporte es prioridad en su vida. Sueña con ser campeona mundial de patinaje artístico.

Esta guayaquileña de diálogo espontáneo y cuya contextura física aparenta más edad, está labrando su carrera paso a paso. Y su esfuerzo sobre la pista de patinaje está dando réditos significativos.

A la medalla de bronce que obtuvo a mediados de 2018 en los Juegos Suramericanos Cochabamba 2018, sumó el título regional que obtuvo el pasado 23 de abril en la categoría junior internacional del Campeonato Sudamericano de Patinaje Artístico que se disputó en Joinville, Brasil.   

Samia empezó a practicar esta disciplina por casualidad. Cuando tenía 4 años se sintió atraída por el patinaje de carrera. “Me gustaba la velocidad y la adrenalina”, recordó con emoción.      

Un día acudió a una convocatoria de la Federación Deportiva del Guayas (Fedeguayas), entidad que se había planteado impulsar el patinaje de carreras e iba a entregar implementos gratis.

La cita era en el coliseo de patinaje artístico de Fedeguayas, por lo que con lo primero que Samia se encontró fue con un entrenamiento de este estilo. Los saltos, las vueltas y las demás maniobras que se realizan en este deporte la deslumbraron. “Mami, yo quiero hacer lo que ellas hacen”, le dijo a Siria Bitar, su madre, quien la acompañaba.

Allí conocieron a Alina Bianchini, la precursora de Samia. Ese fue el inicio de una carrera deportiva que está en franco crecimiento. Antes de consagrarse en Brasil, Samia entrenó un mes en Italia junto a Sara Locandro, entrenadora de la selección de patinaje artístico de ese país, y Andrea Aracu, exnúmero tres del mundo.

Su próximo gran reto será el Mundial de Patinaje Artístico que se realizará en Barcelona (España) del 4 al 14 de julio y en el que intervendrán 4.500 deportistas de 117 federaciones internacionales.

Kristin Nurnberg también trajo medalla de oro del Sudamericano de Brasil. La ecuatoriana, de 15 años, fue primera en la categoría promocional, aunque estuvo a punto de no ir a la competencia.      

Dos meses antes del inicio del torneo sufrió una lesión en la zona sacra, ubicada en la parte inferior de la columna vertebral. Esta dolencia fue provocada por una sobrecarga de entrenamiento.

Estuvo alejada de las pistas y volvió dos semanas antes del torneo. Los saltos no salían y se caía constantemente. Pero no se desanimó. “Ahora sé que una lesión no me puede derrumbar”. Continuó entrenando fuerte hasta lograr una rutina casi perfecta que la condujo finalmente al título.

Aunque no pudo viajar con su entrenadora, durante el torneo mantuvo la concentración. Su psicóloga deportiva le envió audios por WhatsApp para que manejara la presión y la ansiedad propias de la competencia. (I)

Keila Díaz. La patinadora de 11 años se colgó una medalla de oro en la categoría infantil, en Brasil. Foto: Karly Torres / El Telégrafo