La ambateña María Pastuña, en mujeres, y el capitalino Miguel Almachi en varones, ganaron los 10 kilómetros de la prueba pedestre Ruta de las Iglesias, que el último sábado cumplió su undécima edición.  

La prueba, cuyas principales características son que parte del recorrido que se efectúa por el Centro Histórico de Quito y se realiza en la noche, contó con 10 mil participantes inscritos oficialmente y alrededor de 5 mil que intervienen de manera informal.   

Pastuña, que durante un tramo del trayecto estuvo relegada el tercer lugar, aceleró el ritmo y rebasó a  las quiteñas Jéssica Paguay y Diana Landi, quienes encabezaban la ‘marea humana’ del certamen.

La tungurahuense admitió que su triunfo se labró al llegar a la parte plana del recorrido, donde suele desarrollar mejor su potencial. Esta circunstancia se asemeja a lo ocurrido en 2014, cuando Pastuña también superó a las 2 capitalinas y remató primera.

Sin embargo, Pastuña no mejoró su marca del año pasado: 35 minutos 27 segundos (35m27s) y paró el cronómetro en 35m31s. En segundo puesto, con 36m01s se ubicó Jéssica Paguay, y en tercero, Diana Landi, con 36m03s.

La justa masculina también resultó reñida; desde el principio Miguel Almachi, el imbabureño César Pilaluisa y los cotopaxenses Javier Simbaña y Segundo Jami tuvieron presencia en el pelotón puntero.

Desde el inicio no hubo tregua, la presión por ganar tornó muy pareja la competencia. Todo era cuestión de imponer el ritmo y sostenerlo hasta la meta; las escasas diferencias entre uno y otro hicieron que se alternen en la punta, sin tener chance a escaparse de los adversarios. Si les era difícil subir la velocidad, al menos no debían bajarla.

En medio de ese panorama, aprovechar la mínima oportunidad de sacar ventaja puede ser decisivo, y quien lo hizo fue Almachi, que lució mejor en los trechos rectos y se desprendió de sus rivales.

Tras detener el reloj en 31m39s, el quiteño no únicamente consiguió el triunfo, sino mejoró su crono en relación con el año pasado (31m40s). Aunque, dicho por él mismo, la justa se tornó tan difícil que lo único que pensó mientras corría era en llegar primero, sin importar con qué tiempo.

La disputa del segundo lugar no perdió dramatismo y solo se definió en la última parte. El otavaleño César Pilaluisa aceleró y, con 32m24s, se hizo con la medalla de plata. Simbaña, que cubrió la distancia en 32m25s, se resignó al bronce.

Pilaluisa cerró agosto con 2 podios, ya que a inicios de mes se adjudicó el primer sitio en la carrera nocturna Nuestra Señora de Las Nieves, otra lid nocturna en la que también se pasa por las capillas e iglesias de San Gabriel, cabecera cantonal de Montúfar (Carchi).

En su condición de vencedores, María Pastuña y Miguel Almachi recibieron un pasaje aéreo para una maratón en Latinoamérica y $ 1.500 para gastos. La familia Solah, promotora del torneo, agradeció la acogida de la ciudadanía, que cada año es mayor. (I)