Como un nuevo aire calificaron los deportistas de alto rendimiento de Ecuador la autorización recibida para regresar a las pistas, piscinas, rutas, coliseos y gimnasios. Claro, acatando las respectivas recomendaciones de cuidado para evitar el contagio del covid-19 (coronavirus).

Una de las primeras en hacerlo fue la marchista azuaya Johana Ordóñez, quien, junto con su esposo Henry Beltrán, empezaron los entrenamientos desde muy temprano, cumpliendo todas las normas de bioseguridad establecidas en el Plan Nacional de Reactivación Deportiva para el Alto Rendimiento.

El plan está elaborado según la semaforización de las provincias o cantones y contiene lineamientos específicos para la frecuencia en la que se puede entrenar, las medidas de protección, las condiciones de los espacios donde pueden hacerlo, así como movilizarse con salvoconductos.

Los trabajos de mantenimiento del estado físico desarrollados en casa, le sirvieron a la campeonapanamericana de l os 50 kilómetros en Lima 2019 para cumplir casi sin problemas un circuito de 13 km cerca de su casa en Cuenca.

Tras el retorno a los entrenamientos al aire libre, Johana comentó que “nos hemos enfocado en la técnica, es muy distinto entrenar en casa con la caminadora y ahora salir a las calles, tenemos que cuidarnos mucho para evitar lesiones, pero fue un recorrido muy ameno e interesante después de tanto tiempo en confinamiento”, manifestó la azuaya.

Los deportistas nacionales permanecieron cerca de 60 días en cuarentena realizando sus prácticas en sus domicilios. Muchos de ellos se las ingeniaron para no perder el estado físico, como la golfista Daniela Darquea, quien adaptó una red para ensayar los tiros largos, o los escaladores Carla Pérez y Esteban Mena, practicando en un muro de piedras en el cerramiento de su casa.

El entrenador de la cuencana, Julio Chuqui, recomendó que no se aceleren en los ejercicios que hacen, porque hay que respetar los tiempos, readaptar el cuerpo debido a que “en casa no podíamos excedernos de los ejercicios más de una hora y ahora iniciaremos con jornadas más largas”, contó.

En esto coincidió el director técnico Luis Chocho. “Nuestros atletas tendrán que nuevamente adaptar ciertos trabajos técnicos, que son los especiales que se hacen en pista, con intervalos”, manifestó el formador de grandes marchistas.

Los pupilos de Chocho no entrenarán de momento en la pista, hasta aclimatar el cuerpo a las nuevas condiciones. En principio lo harán en las calles o avenidas de Cuenca, a orillas del río o quizás también en las montañas aledañas.

El estratega planificó exclusivamente con Claudio Villanueva, campeón panamericano en los 50 km, trabajar en la pista “Jefferson Pérez” dos días a la semana, lunes y jueves.

Los adiestradores también deben planificar con los miembros de la Secretaría del Deporte y los miembros del Plan de Alto Rendimiento para “que nos orienten en algunos aspectos, sobre todo del regreso de los atletas a Quito y una de las preocupaciones que tenemos es cómo ellos retornan a la capital”, mencionó el técnico Nelson Gutiérrez. 

El profesional cubano se encarga de la preparación de atletas élite como Ángela Tenorio, Anahí Suárez y Álex Quiñónez.

Además del atletismo podrán practicarse deportes como ajedrez, buceo, canotaje, ciclismo, ecuestres, fisicoculturismo y potencia, golf, karate do, pesas, natación, patinaje, pentatlón moderno, remo, taekwondo, tenis de campo, tiro con arco, triatlón y vela.

No todos quieren volver
Pese a tener la autorización para retomar la actividad fuera de casa, la atleta Rosalba Chacha y la karateca Jaqueline Factos aún no tienen contemplado salir a practicar.

Factos contó que “la Federación no ve pertinente ponernos en riesgo, al no tener eventos deportivos este año. Además me parece precipitado volver a la normalidad”, dijo la Tricolor.

Mientras que Chacha prefiere seguir con entrenamientos en casa, por “seguridad”, admitió. Volvería a la ruta recién los primeros días de junio. (I)