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Hurtado, mundialista en su primer año como sénior

El marchista quiteño clasificó al Mundial que se realizará en Doha. Fue juvenil hasta 2018 y se adapta con éxito a la categoría superior, donde compite con la élite.
El marchista quiteño clasificó al Mundial que se realizará en Doha. Fue juvenil hasta 2018 y se adapta con éxito a la categoría superior, donde compite con la élite.
Foto: Marco Salgado / El Telégrafo
13 de abril de 2019 - 00:00 - Redacción Fanático

La transición de juvenil a sénior no tomó desprevenido al marchista David Hurtado y ya afronta su primer año como tal, como si tuviera varias temporadas compitiendo junto a los mejores del mundo.

Ya lleva tres pruebas en el nivel superior y la última, que se realizó en Rio Maior, Portugal, representó un paso más en su carrera. Por el tiempo que registró en los 20 kilómetros, 01h22m04s, accedió al Mundial absoluto que se realizará en septiembre, en Doha, Qatar.

En Portugal estuvo en la  partida junto con la élite de la marcha, como el colombiano Éider Arévalo, que logró la medalla de oro en el Mundial de Atletismo de Londres en 2017 y también el brasileño Caio Bonfim, que se perfila como uno de los mejores del continente en la disciplina.

“Estos rivales me sacan cinco o diez años de experiencia en la categoría, por lo que me quedé muy contento de compartir con ellos. En la línea de partida todos somos iguales y eso nos da alegría para seguir soñando con mejores resultados”, dijo el viernes 12 de abril el deportista en un conversatorio realizado en Quito.

En Portugal quedó en sexto lugar, no muy lejos de sus rivales. Además, registró su mejor tiempo personal en los 20 kilómetros, después de superar la marca que consiguió en Estados Unidos.

Es conocido que Hurtado empezó en la marcha por el doble medallista olímpico, Jefferson Pérez. Él recuerda bien cuando vio por televisión cuando “Jeff” consiguió la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.

Los registros de Pérez siempre han sido los mejores en la marcha nacional, por lo que Hurtado se compara constantemente con la progresión que tuvo el cuencano mientras estuvo activo.

Por ejemplo, señaló que cuando Pérez tenía 19 años, su mejor tiempo era de 01h24m34s y hoy el joven deportista consiguió bajar ese registro en dos minutos, tras el sexto lugar en Portugal.

También se proyecta en alcanzar el tiempo que consiguió el medallista olímpico en Atlanta 1996, con 01h20m06s. “Ese tiempo está proyectado conseguirlo y voy tras sus pasos. Es atrevido decirlo, pero quiero conseguirlo”.

Hurtado quiere ir paso a paso para alcanzar la excelencia en este deporte y clasificarse a sus primeros Juegos Olímpicos, en Tokio 2020. Pérez fue medallista con 22 años; Hurtado asistiría a Tokio con 21.

La próxima prueba del marchista será el 20 de abril en el Campeonato Panamericano de Marcha en México. Viajará el próximo miércoles hasta Norteamérica, pero antes tiene previsto realizar un entrenamiento de altura.

El lugar elegido es el Parque Nacional Cotopaxi, donde estará junto con su entrenador, Javier Cayambe. Dijo que durante su preparación siempre ha aprovechado los recursos naturales del país y por eso se ha entrenado por igual, tanto en altura como a nivel del mar.

El objetivo en México es quedar entre los cinco primeros, mientras que en el Mundial de Doha se plantea estar al menos entre los 15 primeros lugares.

“Acceder al Mundial es el resultado de todo el proceso que he realizado en mi carrera deportiva. Estoy muy feliz de mi progreso, pero no puedo detenerme ahí; sé que hay muchas cosas por mejorar”, expresó el marchista.

Pasar de juvenil a sénior no fue problema. Desde finales de 2017 lo mentalizaron para aquello y su cuerpo técnico lo llevó de a poco para que se acople bien al siguiente escalón.

Cambiar de 10 kilómetros, la distancia en la que compiten los juveniles, a marchar en 20 km fue la principal preocupación. Sin embargo, físicamente siempre estuvo bien preparado para aquello.

Realizó unos 20 kilómetros no oficiales y las sensaciones fueron excelentes, por lo que la transición fue natural y sin dificultades que compliquen su adaptación.

El deportista no descuida sus estudios y ya cursa el cuarto semestre en la carrera de Mercadotecnia Deportiva en la Universidad de las Américas (UDLA).

La institución educativa le otorgó una beca completa en 2017 y lo respalda para que cumpla con sus obligaciones académicas, en medio de la preparación deportiva. (I)

Foto: Marco Salgado / El Telégrafo

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