Miles de personas de Santa Maria realizaron una marcha para recordar a las víctimas del incendio en una discoteca de esa ciudad del estado brasileño de Rio Grande do Sul, que dejó un saldo de 231 muertos.

Convocada por redes sociales, la denominada Caminata de luto, se inició anoche en el parque central de esa ciudad y terminó a la medianoche en el Centro Deportivo Municipal, que acogió hasta la víspera a los cadáveres de los fallecidos durante el incendio registrado en la discoteca Kiss, el domingo último.

Vestidos de blanco, más de cinco mil personas avanzaron en silencio hasta las proximidades del centro recreativo, aun acordonado por la Policía, donde pidieron un minuto de silencio y cantaron los himnos de Brasil y del estado de Rio Grande do Sul.

Con linternas encendidas y celulares en las manos, la muchedumbre continuó su marcha hasta el Centro Deportivo Municipal, donde volvieron a manifestar su luto por las víctimas de este siniestro, el peor registrado en la historia de Río Grande do Sul.

Se trató de un acto de paz por los que murieron y los lesionados en este trágico suceso que entristeció a Santa María, destacó un estudiante de la Universidad de esa localidad.

Los sepelios de la mayoría de las víctimas mortales de este incendio se realizaron ayer. Algunos cadáveres fueron velados en el Centro Deportivo Municipal, otros fueron trasladados, por voluntad de sus familiares, a iglesias evangélicas, asociaciones comunitarias y otros municipios y estados.

Últimos reportes del Ministerio de Salud señalan que en esa ciudad permanecen ingresados 80 personas, mientras cerca de 50 se encuentran en Porto Alegre, la capital estadual, debido al deterioro de su salud.

Joel Oliveira Dutra, a cargo de las investigaciones, dijo que fueron detenidos los empresarios Mauro Hoffman y Elissandro Spohr, dueños de la discoteca y dos integrantes de la banda de músicos, que actuaba en el momento en que se desató el fuego en el establecimiento.

Embargan bienes de propietarios de discoteca

La medida fue solicitada para garantizar el posible pago de indemnizaciones en caso de que los dos dueños del establecimiento.

"El propósito de la medida es garantizar el derecho de las personas a una futura indemnización, de modo colectivo e igualitario, para todos los familiares de las víctimas de la tragedia", afirmó el defensor público general del estado brasileño de Río Grande do Sul, Nilton Arnecke, en declaraciones al portal G1.

El embargo tanto de los bienes de la compañía propietaria de la discoteca Kiss como de los dos socios de dicha empresa, solicitado por Arnecke, fue ordenado en la noche del lunes por el juez Afif Simoes Neto, del foro penal de Santa María, ciudad del estado de Río Grande do Sul, fronterizo con Argentina y Uruguay.

La policía arrestó el lunes a cuatro de las personas a las que investiga como posibles responsables por la tragedia, entre ellos los dos dueños de la discoteca y dos de los músicos de la banda que se presentaba en el establecimiento en el momento en que comenzó el incendio.

Uno de los propietarios, Elissandro Spohr, fue arrestado en la vecina ciudad de Cruz Alta, adonde, según su abogado, había viajado para ser atendido en un hospital con síntomas de intoxicación respiratoria por temor a permanecer en Santa María.

El otro propietario, Mauro Hoffmann, fue detenido tras presentarse en la comisaría de Santa María y luego de que la policía fracasara en diferentes operaciones para localizarlo.

Según relatos de supervivientes, el incendio comenzó cuando un integrante del grupo encendió un artefacto pirotécnico cuyas chispas alcanzaron la espuma utilizada como aislante acústico en el techo de todo el establecimiento.