Miles de ciudadanos y de profesionales sanitarios salieron ayer a las calles en Madrid, España, para formar cadenas humanas alrededor de los hospitales públicos como rechazo a los planes del Gobierno Regional de privatizar la gestión y algunos servicios de la sanidad madrileña.

Los madrileños, entre los que había más personas mayores y niños, acudieron con aire festivo a la convocatoria de la Mesa en Defensa de la Sanidad Pública denominada “Abraza tu hospital”, que se celebró en todos los hospitales de la capital y de la comunidad autónoma.

Con cánticos y carteles como “La sanidad no se vende, se defiende”, los congregados, cogidos de la mano, lograron rodear grandes hospitales, como el Gregorio Marañón.

El objetivo de esta protesta, según Magdalena Salcedo, integrante de un sindicato sanitario, es exigir al Gobierno Autonómico “que ponga en marcha los mecanismos necesarios para hacer posible una sanidad pública más eficiente”.

Con el lema “SOS Discapacitados - Salvemos los derechos, la integración y el bienestar”, miles de personas con discapacidades, acompañadas de sus familiares, llegaron desde diversas ciudades del país al centro de la capital española, para protestar contra los planes del gobierno al son de tambores y silbatos, y agitando pequeñas banderas blancas.

El gobierno español, inmerso en un histórico proceso de austeridad y recortes, espera ahorrar 7.000 millones de euros por año en el sector de la salud, un esfuerzo que repercute en las finanzas de las regiones, que gestionan este presupuesto.