La Policía Federal brasileña confirmó ayer que abrió una nueva investigación sobre la presunta implicación del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva en hechos de corrupción por los que fueron condenados a prisión 25 empresarios y políticos.

La investigación inició por un pedido del Ministerio Público y se refiere a supuestas gestiones hechas por Lula da Silva  ante la empresa lusa Portugal Telecom, con el   fin de obtener financiación para sus campañas y las del Partido de los Trabajadores (PT).

La Policía intentará determinar la veracidad de las denuncias formuladas por el publicista Marcos Valerio Fernandes, condenado a 40 años de prisión por su responsabilidad en escándalos ocurridos entre 2002 y 2005 y juzgados el año pasado por el Tribunal Supremo.

Según Fernandes, Lula da Silva personalmente negoció con el entonces presidente de Portugal Telecom, Miguel Horta, quien habría donado 7 millones de reales ($ 3,5 millones) al partido gobernante para financiar la campaña electoral.