A cuatro días de las presidenciales en Brasil, Dilma Rousseff consolidó su ventaja sobre el adversario Aécio Neves. Una nueva encuesta muestra a la presidenta con 52% de las intenciones de voto, sobre 48% de su adversario socialdemócrata.

Un factor clave que contribuyó a cambiar la tendencia que parecía imponer al exgobernador de Minas Gerais: la economía. Datafolha detectó que el 44% del electorado cree que la economía mejorará; un mes atrás apenas el 32% se mostraba con ese optimismo.

Apenas el 15% juzgó que puede empeorar. Pero hubo otros hechos significativos que contribuyeron a derruir la imagen del postulante del Partido Socialdemócrata de Brasil (PSDB). El senador y exgobernante mineiro ejerció un nivel de agresividad que la sociedad brasileña rechaza.

De acuerdo con la prestigiosa consultora, el 71% de los encuestados expresó su repudio a la beligerancia demostrada en los dos primeros debates en la segunda vuelta. La mayoría consideró que Neves fue más agresivo.

El candidato llegó a enfilar su dedo índice frente a Rousseff al tiempo que la trató de “liviana” y “mentirosa”, además de enrostrarle que no le hacía honor a su cargo. Ya había cometido idéntico desmán durante las confrontaciones entre presidenciables de la primera vuelta.

Según la encuestadora, las mujeres no le perdonan a Neves la violencia implícita en esta forma de proceder y ha perdido puntos en el electorado femenino.

En efecto, las encuestas de Ibope y Datafolha reflejan un incremento de 42% a 46% en la intención de voto de las mujeres del país hacia la presidenta y candidata a la reelección por el PT. En contraste, el abanderado del PSDB, Aécio Neves, disminuyó de 44% a 41% en este sector.

Según el analista político Gerson Camarotti, del diario O Globo, el sondeo de Datafolha hizo prenderse “la luz de alerta” en las filas del Partido del PSDB.

Hace menos de una semana, Neves aparecía como leve favorito con intenciones de voto equivalentes al 51% de los apoyos, frente al 49% de la mandataria. Los directores del Instituto Datafolha, Marcos Paulino y Alessandro Janoni, afirmaron ayer que la inversión de posiciones “puede significar el inicio de una tendencia a la reelección” de Rousseff, aunque todavía no se pueden descartar que refleje solamente “oscilaciones dentro del margen de error” del sondeo, que es de dos puntos porcentuales, hacia arriba o hacia abajo.

No obstante, destacaron que, en los últimos días, la candidatura de Rousseff a la reelección logró afianzarse en la mayoría de los sectores del electorado, y avanzó espectacularmente en el industrializado sureste del país.

Paulino y Janoni apuntaron que Rousseff es ahora líder de la disputa entre los electores con ingreso familiar de hasta cinco salarios mínimos (poco menos de $ 1.500 por mes), la llamada “nueva clase media”, que concentran los beneficiarios de las políticas de inclusión social adoptadas por el PT.

No obstante, los dos ejecutivos advirtieron que el repunte de Rousseff todavía no puede estar considerado como una tendencia sólida, y que su confirmación dependerá de las estrategias que adoptarán los dos candidatos en los últimos días de la campaña y también del debate que realizarán mañana, organizado por la poderosa red televisiva Globo.

“Creo que, en esta segunda vuelta, el último debate será muy importante”, afirmó asimismo el director general del Instituto Brasileño de Opinión Pública y Estadística (Ibope), Carlos Augusto Montenegro, quien consideró que la elección presidencial de 2014 “es la más difícil de la historia”.

“Esta es una elección plebiscitaria. De un lado están personas muy agradecidas a Dilma (Rousseff)... Es muy difícil prever quién va a ganar”, agregó Montenegro, recogió la prensa local.

DATOS

Las clases sociales D y E están claramente con Rousseff (PT). Las clases A y B están claramente con Neves (PSDB). Y la clase C, dividida, según el presidente de la consultora, Renato Meirelles.

Data Popular, que estudia las pautas del desarrollo de las llamadas clases C y D. Dice que estas personas han mejorado su vida en los últimos años sustancialmente gracias a la generación de empleos formales.

El último gran debate de la campaña se celebrará mañana en la cadena Globo, la emisora más grande del país continental de 202 millones de habitantes.

Hoy los candidatos culminan sus respectivos cierres de campaña con diversos actos proselitistas, en los cuales buscarán apoyos para obtener los votos necesarios para triunfar en el balotaje del domingo.