La Corte Suprema de Connecticut, EE.UU., ha prohibido el uso de la pena de muerte en el estado, alegando que se trata de un castigo "inconstitucional". La decisión afecta a las personas condenadas a muerte que cometieron sus crímenes antes de que los legisladores de Connecticut abolieran en 2012 la pena capital para todos los casos futuros.

La Corte Suprema de Connecticut ha dictaminado que la ley de la pena de muerte del estado actualmente es inconstitucional, y ha prohibido la ejecución de 11 prisioneros condenados a muerte, informa el periódico local Hartford Courant.

La ley en cuestión, que fue promulgada en 2012, prohibió la ejecución de las personas condenadas a pena capital después de la fecha de la promulgación, pero permitía la ejecución de aquellos prisioneros que habían sido condenados antes. (I)