Varios atentados con bombas y ataques armados causaron este lunes la muerte de al menos 84 personas y heridas a cerca de 300 en distintas localidades de Irak.

Fuentes de seguridad señalaron que las acciones violentas sacudieron el país por segundo día consecutivo, luego del bombazo registrado el domingo en la ciudad santa chiita de Najaf, con saldo de 23 heridos y cuantiosos daños materiales.

Uno de los ataques más mortíferos de hoy tuvo lugar en una base militar ubicada al este de la localidad de Al Doloaiya, 90 kilómetros al norte de Bagdad, donde al menos 15 soldados perdieron la vida.

También al norte de la capital iraquí, otros dos miembros de las Fuerzas Armadas murieron y nueve personas resultaron heridas en atentados registrados en la provincia de Salah El-Din. El asalto ocurrió a primeras horas mientras los uniformados dormían.

En tanto que un coche bomba y dos artefactos explosivos que estallaron en las localidades de Al Fares y Al Hamdiyat, en la zona de al Tayi. Allí siete fueron las víctimas mortales y 28 los heridos, además de causar daños materiales.

El Ministerio del Interior confirmó también que tres civiles perdieron la vida y otras 31 sufrieron lesiones como consecuencia de otro carro bomba que estalló mientras estaba estacionado en el barrio Husseiniyah del oriente bagdadí.

Además, en Bagdad se registraron ocho muertos y 23 heridos por la explosión de un coche bomba cerca de restaurante popular en el suburbio de Ciudad Sadr, de mayoría chií.

Otro artefacto estalló en el barrio de Al Qadesiya, en el oeste de la capital, lo que causó heridas a tres civiles.

Por otra parte, al menos ocho personas murieron y 27 resultaron heridas por el estallido de dos coches bomba y un artefacto en la provincia de Diyala, al este de Irak.

La espiral violencia de este lunes incluyó, entre otros escenarios, la localidad de Mosul (norte), Al Diwaniya (sur), donde se registró un ataque con coche bomba en un mercado popular, dejando 4 fallecidos y 36 heridos.

Además, los ataques tuvieron lugar en la ciudad petrolera de Kirkuk, con saldo de 11 muertos y 35 heridos. Asimismo se registraron víctimas en Al Maqdadiya, Al Tuz, Bahars, Baquba, y Al Tarmiya.

Al momento ninguna organización armada ha reivindicado los atentados.

Irak vive un repunte de la violencia con frecuentes ataques dirigidos contra objetivos chiíes y fuerzas de seguridad que se han intensificado desde la retirada, en diciembre pasado, de las tropas estadounidenses y la emisión de una orden de arresto contra el vicepresidente suní, Tareq al Hashemi.