Un veterano de la Segunda Guerra Mundial devolvió todas sus  medallas al primer ministro ruso, Vladímir Putin, en señal de protesta  por sus malas condiciones de vida.
 "Por la desesperación que  me embarga en vísperas del Día de la Victoria, yo, Zasorin Vasili  Iósifovich, inválido de la Gran Guerra Patria, le devuelvo mis  medallas", reza la carta que el veterano envió a Putin, informa hoy el  diario "Moskovski Komsomólets".
 La misiva añade que, "con la ayuda de los funcionarios públicos, la madre patria se convirtió en madrastra".
 "Cuando yo era joven y fuerte, el país me necesitaba, y ahora que soy  viejo y débil, ya no me necesita. Pues, por ello, yo tampoco necesito  mis medallas", agrega el veterano, justo antes de mandar sus  condecoraciones al Kremlin, según el rotativo.
 Las condiciones  en las que vive Zasorin, afirman testigos citados por el periódico,  están muy lejos de las declaraciones de Putin, que ha prometido en  varias ocasiones proporcionar casas nuevas a todos los veteranos.
 Según Galina, la hija del veterano y que está al cuidado de su padre,  en la casa no hay ni retrete ni calefacción central y, además, las  vigas están agrietadas y el techo tiene goteras.
 Para ir al  baño el veterano, de 87 años, tiene que salir a la calle y utilizar un  cubo, mientras una comisión estatal que inspeccionó la residencia  concluyó que la casa es apta para vivir, ya que cuenta con ventanas y  puertas.
 Asimismo, los inspectores recomendaron a Zasorin que  tapara los agujeros del techo con trapos, informa el diario, que añade  que el veterano sufrió un ataque cardiaco tras la visita de la comisión.
 Rusia celebra cada 9 de mayo el Día de la Victoria sobre la Alemania nazi, jornada en la que los  octogenarios veteranos, militares y civiles, de la contienda salen con  sus medallas a la calle, donde son agasajados con flores por los  viandantes.
