Al menos 42 personas murieron ayer y un centenar resultaron heridas en una cadena de atentados registrada en Bagdad y en las provincias del sur y norte de Irak.
El ataque más sangriento ocurrió en la ciudad Hila, capital de la provincia de Babel, ubicada al sur de Bagdad, donde 18 personas murieron y 34 resultaron heridas por el estallido de tres coches bomba cerca de un mercado y de una zona de talleres mecánicos.
En el barrio de la ciudad santa chií de Kerbala, 110 kilómetros al sur de la capital, la explosión de un coche bomba causó al menos cuatro muertos y 17 heridos.
Tres personas murieron y otras dos resultaron heridas por la explosión de otro coche bomba en la zona Jamsa Mil, al sur de Basora, unos 560 km al sur de Bagdad.
En una carretera de la provincia de Salahedín, al norte de Bagdad, varios hombres armados obligaron a tres personas que se transportaban en un coche a bajarse del vehículo y les dispararon antes de que se dieran a la fuga.
Un artefacto explosivo estalló cerca de una vivienda en el pueblo Bahraz, situado en la provincia oriental Diyala, que dejó tres muertos, entre ellos un profesor.
Dos coches bomba explotaron consecutivamente cerca de los mercados de la localidad Al Dabsh, 25 kilómetros al noreste de Kirkuk, lo que causó el fallecimiento de dos civiles y heridas a otros 16, así como daños materiales en los comercios y vehículos que estaban cerca.
Además, dos personas murieron y diez más resultaron heridas por la explosión de dos coches bomba cerca de un restaurante en la localidad Al Hafriya, en la provincia de Waset, al sur de Bagdad.
La explosión de otro coche bomba provocó dos muertos y siete heridos en la zona Al Mashtal, en el sureste de Bagdad.
Dos campesinos fallecieron al ser atacados por hombres armados en un jardín en la localidad de Abu Saida, en la provincia Diyala.
En el barrio Waziriya, en el norte de Bagdad, un coche bomba explotó al paso del convoy del alcalde de la capital, Riad al Adad, quien salió ileso del ataque, pero hubo un muerto y cuatro heridos.
En las zonas de Abu Ghreib, 25 kilómetros al oeste de Bagdad, y Abu Deshir, al sur de la capital, una persona falleció y otras dos resultaron heridas por el estallido de dos artefactos explosivos.
En otro ataque, un guardia de seguridad que trabajaba en una instalación petrolera en el sur de Mosul, 400 kilómetros al norte de Bagdad, pereció por disparos de hombres armados cuando se encontraba delante de su vivienda.
La violencia ha aumentado en los últimos meses en Irak, donde el sábado murieron 25 personas en un atentado suicida.