El presidente de Colombia, Juan Manuel Sanatos, afirmó hoy en Bogotá que la guerrilla de su país no ha dejado más alternativa que la de la confrontación para poner fin al conflicto armado interno.
 La  confrontación "seguirá con toda la contundencia y la decisión, hasta que  (los rebeldes) abran la opción de la razón", advirtió Santos durante  una conferencia que impartió a un auditorio castrense en la Universidad  Militar Nueva Granada.
 "Que nadie se equivoque", agregó el  jefe del Estado, quien en los días recientes ha recibido de su  predecesor Álvaro Uribe (2002-2012) y sectores afines fuertes críticas  por un supuesto descuido en la política de seguridad.
 En la  última semana, el país fue escenario de dos hechos de resonancia, el  primero de ellos un atentado con bomba al que sobrevivió herido en  Bogotá el exministro del Interior Fernando Londoño, hace nueve días.
 El otro fue el ataque de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de  Colombia (FARC) a una patrulla en la frontera norte con Venezuela que  dejó 12 militares muertos.
 "Si hoy la guerrilla habla de paz y  pide diálogos no es por iniciativa propia, sino porque ustedes, las  Fuerzas Armadas de Colombia, les demuestran día a día que por el camino  de las armas jamás obtendrán su cometido", consideró Santos.
 El gobernante agregó que si se llega al escenario de unas conversaciones  de paz el triunfo también será de las instituciones armadas.
 El diálogo "será el reconocimiento del enemigo de que por la violencia  jamás lograrán sus objetivos", insistió Santos, quien prometió que "en  ninguna de las alternativas -la razón o la fuerza- el futuro y la  dignidad de las Fuerzas Armadas están o estarán en juego".
 En  este contexto, Santos enfatizó: "No podemos dejarnos fraccionar,  debilitar o apaciguar, cuando lo que el país reclama, con respeto y  admiración por sus tropas, es más acción contra quienes atentan contra  la vida y la tranquilidad de los colombianos".
 
