Peña Nieto llega a China y deja a México en tensión
Pese a las críticas, escándalos y protestas en México, el presidente Enrique Peña Nieto llegó ayer a China como parte de una gira internacional, para participar, durante dos días, de la cumbre de mandatarios y representantes de los 21 integrantes del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC).
El mandatario se enfrenta a la peor crisis desde que en 2012 asumió la presidencia a raíz de la desaparición de 43 estudiantes en la noche del 26 de septiembre en la localidad de Iguala, en el estado de Guerrero, tras ser brutalmente atacados por policías locales y entregados a sicarios que los habrían asesinado, incinerado y arrojado los restos a un río.
Peña Nieto intentó justificar, durante una escala técnica en Alaska (Estados Unidos), su decisión de viajar a China al asegurar que sería una “irresponsabilidad” no estar en un evento como la APEC, que representa al 40% de la población mundial, más de la mitad del PIB mundial y casi la mitad del comercio del planeta.
Mientras tanto, en México 2.500 manifestantes se instalaron ayer frente a las instalaciones del aeropuerto internacional de la turística Acapulco (sur de México) para exigir la presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos.
Felipe de la Cruz, padre de uno de los estudiantes de Ayotzinapa asesinados, entabló una conversación telefónica con el subsecretario del Gobierno de Guerrero, quien según versiones del diario Excelsior autorizó la marcha bajo el compromiso de hacerla pacíficamente.
Según voceros del Estado, los enfrentamientos provocaron lesiones a 18 agentes federales. Mientras que los turistas fueron evacuados del lugar, indicó Prensa Latina. “Todos los mexicanos estamos en esta lucha (...). No me importa llegar más tarde porque es justo lo que están haciendo”, declaró a la AFP Beatriz Barros, una usuaria afectada por los retrasos.
La presencia del presidente mexicano en Pekín genera expectativas tras su decisión de anular la licitación para construir una línea de tren de alta velocidad que había ganado un consorcio liderado por la empresa china de ferrocarriles CRCC, luego de que se generó un escándalo destapado por la prensa que asegura que la primera dama, Angélica Rivera, compró una lujosa mansión en 2012, valorada en $ 7 millones, a una empresa mexicana asociada precisamente al grupo chino que ganó la licitación.
Tras la decisión de anular la licitación, CRCC anunció que estudia emprender acciones legales.
El viaje “es una burla, demuestra su falta de calidad moral jugando con los sentimientos y la dignidad de 43 estudiantes”, indicó el domingo Juan González, estudiante de la escuela para maestros rurales de la comunidad Ayotzinapa (Guerrero, sur) a la que pertenecen los desaparecidos.
Amnistía Internacional también reprochó al presidente que su viaje demuestra “poco interés en hacer frente a la grave situación de derechos humanos en México”.
El primer mandatario mexicano sostiene que la violencia ha bajado desde que asumió el poder, pero más de 100 mil personas han sido asesinadas o desaparecidas desde que Calderón lanzó en 2006 su combate militar contra los cárteles. La inmensa mayoría de esos crímenes está impune.
Peña Nieto tiene previsto proseguir su viaje para asistir los días 15 y 16 en Brisbane (Australia) al G20.