La UE concede 15 millones euros a Pakistán para combatir crisis humanitaria
La  UE otorgará una ayuda adicional de 15 millones de euros a Pakistán que  servirá para apoyar a las víctimas de la doble crisis humanitaria que  afecta a la población por el conflicto en el norte y varias inundaciones  en el sur del país.
 Según informó, este jueves, la Comisión Europea,  esta ayuda adicional eleva el total de la asistencia humanitaria de la  UE a Pakistán a 70 millones de euros en lo que va de año. La  comisaria europea de Cooperación Internacional, Ayuda Humanitaria y  Respuesta a las Crisis, Kristalina Georgieva, afirmó que estas dos  crisis de Pakistán están afectando a decenas de miles de personas  vulnerables en el norte y sur del país.
 "Han traído  sufrimiento a los que han huido de sus casas por el conflicto interno y a  las víctimas de los tres años consecutivos de devastadoras inundaciones  que han destruido sus vecindarios y dejado escasez de alimento y  hambruna", aseguró.
 La asistencia económica adicional, que  procederá de la Oficina de Ayuda Humanitaria, ayudará a combatir la  malnutrición que afecta a determinadas zonas de Pakistán, como la  provincia de Sindh -en el sudoeste del país-, donde se espera un  drástico empeoramiento de la situación por las inundaciones de las  últimas dos semanas.
 Las inundaciones que se produjeron en  2011 afectaron a unos 5,8 millones de paquistaníes, así como a muchas de  las regiones que fueron golpeadas en 2010. La provincia de  Sindh se vio particularmente afectada, y después al menos 2,2 millones  de paquistaníes sufrieron de nuevo las consecuencias de fuertes  inundaciones en septiembre de este año.
 Por otra parte, el país sufre varios conflictos que siguen provocando cientos de miles de desplazados. Desde enero operaciones militares en la región tribal noroccidental  de Khyber han provocado otra ola de unos 361.000 desplazados elevando el  total de paquistaníes que huyen del norte a más de 741.000 personas,  según fuentes comunitarias.
 De ellas, un 11 % vive en campamentos, mientras que el resto ha sido acogido por otras comunidades.
 Entre los mecanismos de ayuda programados figuran el suministro de  alimentos básicos y de agua potable, la reconstrucción de fuentes de  agua públicas, servicios sanitarios y médicos, refugios de emergencia  temporales y un plan de acción que permita reducir las destrucciones y  riesgos en caso de que vuelva a suceder un desastre natural.
