La jueza instructora de Milán Stefania Donadeo  instó este jueves a la Fiscalía a que se abra un proceso al presidente del  Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, por la publicación de escuchas telefónicas de procedencia ilícita en el diario "Il Giornale", propiedad de su hermano Paolo.
Los fiscales del caso habían decidido archivar la parte relativa al  mandatario italiano y habían pedido el enjuiciamiento solo para Paolo Berlusconi, pero ahora, por orden de la juez instructora, tendrán que formular la petición de envío a juicio de Berlusconi a otro magistrado dentro de 10 días.
 Si el procesamiento se concreta, el mandatario tendrá cinco procesos  pendientes al sumarse a los de Mediaset, Mediatrade, Mills y el de la  menor marroquí Ruby.
 La jueza instructora también ordenó que  se incluya entre los investigados al entonces responsable de "Il  Giornale" y ahora director de "Libero", Maurizio Belpietro.
 El único imputado del caso, Paolo Berlusconi está acusado de receptación, estafa y participación en la revelación de  secreto profesional y el proceso comenzará el próximo 4 de octubre ante  la IV sección penal del Tribunal de Milán.
 Si se confirma el envío a juicio de Silvio Berlusconi, este será acusado de participación en la revelación de secreto profesional.
 Los hechos se remontan a 2005, cuando "Il Giornale" publicó una  conversación telefónica entre el presidente de la aseguradora Unipol,  Giovanni Consorte, y el entonces líder del partido Demócratas de  Izquierda (DS), Piero Fassino.
 "Tenemos un banco", aseguraba  en la conversación Consorte al referirse a la operación para intentar  hacerse con el control de la Banca Nazionale del Lavoro (BNL), un caso  por el que la Fiscalía de Roma pidió en abril de 2010 el enjuiciamiento  del presidente de la Unipol.
 La conversación entre Fassino y  Consorte todavía no había sido incluida en las actas de la Fiscalía  cuando fue publicada, ya que estaba aún en manos de la policía y de la  empresa Research Control System (RSC), que se encargaba de realizar las  escuchas.
 El diario "Corriere della Sera" indicó entonces que  el 25 de diciembre de 2005 el director de RSC, Roberto Raffaelli, y su  amigo Fabrizio Favata mostraron la grabación a los hermanos Berlusconi en la residencia que tiene el primer ministro en la localidad norteña de Arcore, cerca de Milán.
 Según afirma Donadeo en su auto, la cinta con la grabación fue "un regalo" para Silvio Berlusconi ante la proximidad de las elecciones generales en 2006, pues su  publicación "habría dañado, como finalmente lo hizo, la imagen de Piero  Fassino".
 La jueza considera que la reacción del primer  ministro al recibir la grabación fue de "satisfacción y agradecimiento" y  en ningún caso de desaprobación.
 "La publicación de la noticia justamente después y solo después de haberla escuchado Silvio Berlusconi, como querían todos, los agradecimientos posteriores por parte de Silvio Berlusconi,  constituyen datos históricamente probados que, interpretados de modo  lógico, hacen necesario el ejercicio de la acción penal" hacia el  mandatario, afirma la magistrada.
 En el mismo auto, Donadeo  acoge la solicitud de la Fiscalía de archivar la hipótesis de  receptación (ocultación o encubrimiento de delincuentes o cosas que son  materia de delito) contra Berlusconi, pues esta acusación sería válida si hubiera circulado un bien material y no una información. 
