Jordi Pujol y Soley compareció este viernes en el Parlament de Catalunya tras varios meses de peticiones por parte de los políticos parlamentarios para explicar, con la mayor claridad posible, los motivos que le llevaron a no declarar una herencia ingresada en cuentas extranjeras durante más de 30 años, siendo además President de la Generalitat desde 1980 hasta 2003.
La comparecencia del expresidente estuvo marcada por dos ejes fundamentales. Uno, en el cual Pujol contó, en un largo relato, las motivaciones que hicieron actuar de esa forma a su padre y su propia actuación como principal heredero de una fortuna declarada de 140 millones de pesetas (aproximadamente 1 millón de dólares), una fortuna que fue creciendo debido a las crisis económicas que sufrió España y que devaluaron la peseta. “No soy un político corrupto”, dijo el expresidente, quien resaltó las dificultades de la época franquista para justificar los hechos: “Mi padre nos dijo, os dejo ese dinero para el día en que tú y tu familia os tengáis que ir”.
Tras la primera intervención llegó el turno de preguntas, en el cual los parlamentarios pusieron de relieve todas las situaciones en las cuales el expresidente podía verse implicado, desde cuestiones de corrupción política durante su mandato, como del tráfico de influencias que pudo usar para beneficiarse económicamente, como en el caso del hundimiento de Banca Catalana en 1988. Ese turno de preguntas no dejó a nadie indiferente. Es más, acabó con los parlamentarios insatisfechos e indignados por la respuesta del ex presidente, quién no dio explicación a ninguna de las cuestiones planteadas.
Pujol se limitó a abroncar a los asistentes, en un discurso nervioso y alterado, y en el cual destacó que “los 30 millones de los que habla la prensa son mentira. Los bancos andorranos han hecho una nota diciendo que son 4,8 millones”. Además, el expresidente tuvo tiempo de lanzar un dardo al Partido Popular y al caso Bárcenas, el caso de corrupción que más escándalo ha generado en la historia de España: “Yo he cumplido con mi compromiso de comparecer y no todo el mundo lo ha hecho.”
En un último turno, los parlamentarios mantuvieron su discurso y denunciaron que Pujol no había respondido a ninguna de las preguntas. “Ha faltado al respeto a toda la gente que le ha pedido explicaciones. Hoy es la hora, tras 34 años, de responder a todo”, manifestó el líder de Iniciativa per Catalunya Verds, Joan Herrera”.