El Ministerio del Interior de Israel  expulsará a una menor de cuatro años nacida en el país y a su madre, una  filipina en condición irregular, en lo que parece ser la aplicación por  el gobierno de Benjamín Netanyahu de una nueva política contra la  inmigración ilegal.
 El arresto de las dos y su trasladado a un  centro de detención en el aeropuerto de Tel Aviv con vistas a su  deportación inminente fue denunciado hoy a medios locales por grupos de  derechos humanos y confirmado por el Ministerio.
 La asociación  "Niños israelíes", que se opone a la expulsión de hijos de sin papeles  nacidos o educados en Israel, teme que la nueva política lleve a la  expulsión masiva de menores de edad, informa la edición electrónica del  diario Yediot Aharonot.
 Según un pacto alcanzado en marzo  entre Netanyahu y el ministro del Interior, el ultraortodoxo Eli Yishai,  los hijos de emigrantes ilegales nacidos en el país y que cursan  estudios en escuelas o guarderías israelíes no serían deportados, como  tampoco sus progenitores.
 El pacto fijaba una moratoria en las  expulsiones que concluyó el mes pasado, explica el diario Haaretz, y  hoy el Ministerio anunció la primera detención, a tan sólo dos semanas  de que comience el nuevo año escolar.
 El Ministerio explicó  que la menor en cuestión no podía acogerse a los criterios de ese  acuerdo, que hablaba únicamente de niños en edad escolar obligatoria, es  decir, con al menos 5 años.
 "Una de las condiciones para  evitar la deportación es que el menor debía estar en el curso de  preescolar obligatorio en el año anterior al que fue tomada la decisión  del gobierno", dice en un comunicado la Dirección General de Población e  Inmigración.
 El problema de cientos de miles de menores,  hijos de emigrantes sin papeles, fue abordado en el documental  "Strangers No More", galardonado en la última edición de los Óscar.
 Rodado en un colegio de Tel Aviv, ponía de manifiesto la difícil  situación que viven los inmigrantes en Israel huidos del genocidio, la  guerra o el hambre, y la negativa de las autoridades a concederles la  ciudadanía israelí.
 Israel concede la nacionalidad de forma  automática a quien tenga al menos un abuelo judío, según la llamada Ley  del Retorno de 1950, mientras que observa una estricta política  migratoria hacia quienes no lo tienen. EFE
