Israel anunció ayer la construcción de aproximadamente 1.200 viviendas en territorio ocupado como contrapartida a la decisión de liberar de la cárcel mañana a los primeros 26 presos de 103 que cumplen condena desde antes de 1993.
La decisión, que ha suscitado la natural condena palestina, fue anunciada por el Ministerio israelí de Vivienda.
“Seguiremos vendiendo casas y construyendo en todas las partes de Israel (...) para dar respuesta a las necesidades de vivienda de los ciudadanos israelíes. Es lo correcto por motivos tanto sionistas como económicos”, argumentó el ministro israelí de Vivienda, Uri Ariel, del partido Habait Hayehudí (Hogar Judío), que representa a los intereses del movimiento colono.
“Israel intenta impedir que se celebren las negociaciones del miércoles”, afirmó el negociador palestino Mohamed Shtaye en un comunicado.