Gobierno de Francia emplea la fuerza contra manifestantes
El gobierno francés empleó la fuerza para desalojar a unos 200 manifestantes contrarios a un plan laboral que se encontraban en una de las varias refinerías en huelga en el país.
Las fuerzas del orden intervinieron en una refinería y un depósito de combustible en la localidad de Fos-sur-Mer (sureste), que estaban bloqueados por militantes de la Confederación General del Trabajo (CGT), el principal sindicato galo.
Los agentes llegaron hacia las 04:00, hora local, y usaron un cañón de agua y gases lacrimógenos para hacer partir a los militantes, declaró Olivier Mateu, de la CGT. Por su parte, los manifestantes lanzaron numerosos objetos. La operación terminó con varios heridos y cuatro manifestantes detenidos.
Las huelgas en seis de las ocho refinerías francesas, los bloqueos en depósitos de combustibles desde hace días para reclamar la retirada del proyecto laboral del gobierno, unido a las compras de precaución de los automovilistas, agotaron el carburante en el 20 por ciento de las 12 mil gasolineras del país, acorde con información divulgada.
Algunos departamentos limitaron la cantidad de combustible que puede cargar cada vehículo.
Los partidarios de la retirada del plan, prometieron endurecer aún más su movimiento esta semana para hacer ceder al Ejecutivo.
Una octava jornada nacional de huelga y de manifestaciones está prevista el 26 de mayo y se espera una huelga interprofesional con una manifestación nacional en París el 14 de junio. El miércoles y el jueves, los ferroviarios de la CGT están llamados a dejar de trabajar de nuevo.
Además, la Confederación llamó a una huelga indefinida en la entidad de transportes metropolitanos de París RATP a partir del 2 de junio.
Un total de siete sindicatos galos decidieron organizar una gran votación en las empresas, las administraciones y los centros de estudios, que se desarrollará en las semanas venideras en paralelo al debate parlamentario del texto.
El objetivo es continuar con los trabajadores y los jóvenes los debates sobre el proyecto, obtener la retirada del mismo con el fin de ganar nuevos derechos que permitan el desarrollo de empleos estables y de calidad, subrayaron.
Desde hace más de dos meses, diferentes acciones se suceden en el país en rechazo a una iniciativa que genera un descontento mayoritario entre los ciudadanos al considerar que beneficia a los empresarios y perjudica los derechos de los trabajadores. (I)