El Gobierno español analiza llevar su conflicto con Reino Unido, sobre el territorio en disputa, ante Naciones Unidas y otros foros internacionales, publicaron ayer los diarios La Razón y El País.
El conflicto de hace tres siglos sobre la soberanía del Peñón se caldeó a finales de julio cuando barcos de Gibraltar echaron bloques de hormigón al mar para crear un arrecife artificial, algo que España alega que bloquea a sus barcos pesqueros.
Según el diario El País, el Gobierno español estudia la posibilidad de llevar el contencioso a debate en la Asamblea General de Naciones Unidas e intentará probar suerte en el Consejo de Seguridad del organismo, donde Reino Unido tiene derecho de veto.
Madrid podría, además, acudir al Tribunal Internacional de La Haya para denunciar la ocupación del istmo que cedió a Londres hace 300 años mediante el Tratado de Utrech y desde entonces ha sido fuente de tensiones. El pequeño promontorio en el sur de la Península tiene unos 30.000 residentes que viven del turismo, las operaciones de juego online y los servicios financieros.
El País añade que el ministro García-Margallo visitará Argentina el próximo septiembre y que analizará con su homólogo argentino, Héctor Timerman, además del pleito por la expropiación de las acciones de Repsol en la petrolera YPF, la posibilidad de que España y Argentina hagan frente común en la ONU por Gibraltar y las Malvinas.
Argentina, recuerda, preside la presidencia pro témpore del Consejo de Seguridad de la ONU y “podría incluir, o intentarlo al menos, el asunto gibraltareño en la agenda del máximo organismo internacional”.
El diario La Razón, a su vez, publicó, el resultado de un sondeo elaborado por NC Report para este periódico en el que, sobre 500 encuestados, un 85,4% opina que Gibraltar es español y debe ser devuelto; 84% considera que España debería ser más firme ante Gran Bretaña; 69,4% está de acuerdo en que la ONU intervenga en el asunto y exigir la devolución del Peñón; 91,2% coincide en que no le parece correcto que la Policía gibraltareña acose a los pescadores españoles.
El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, amenazó el viernes con tomar medidas unilaterales sobre el asunto, mientras buques de la armada británica se dirigían a Gibraltar para lo que ambos países han definido como una visita rutinaria que ya estaba prevista. Rajoy y su homólogo británico, David Cameron, acordaron tratar de sofocar las tensiones sobre el territorio disputado, aunque ambos se han mostrado reticentes a retractarse en sus posiciones.