Cuba centró este martes la atención del Festival de Cine Latino de Chicago a través de tres películas que exploran la vida en la isla y abren un interrogante sobre su futuro.
 "Casa Vieja", "La salsa Cubana" y "Habana Eva" narran historias  familiares, de baile, y de amor, protagonizadas por dos grupos de  personas: las que quieren transformar la isla y las que luchan por  conservarla tal y como está.
 En los filmes, los directores  contrastan la visión de los cubanos con la de quienes visitan la isla  por primera vez o vuelven a su tierra después de muchos años.
 Este es el caso de "Casa Vieja", dirigida por Léster Hamlet y basada en  el clásico homónimo del escritor Abelardo Estorino, que cuenta la  historia de Esteban, un joven arquitecto que vuelve a Cuba porque su padre está a punto de morir, después de 14 años de vivir en España.
 Esteban contempla con indignación cómo en su país las cosas parecen  no haber cambiado ni un ápice desde que él se fue, y su frustración  acaba por distanciarle para siempre de su familia, que no soporta sus  críticas y reproches.
 El joven quiere que su hermana se atreva  a gritar a los cuatro vientos un amor que los demás consideran  ilegítimo, y también se niega a que entierren a su padre como a un héroe  de la Revolución.
 El director, Léster Hamlet, utiliza una jaula como metáfora para criticar la situación política de Cuba.
 Así, al padre de Esteban le fascinaba fabricar jaulas que regalaba a  todos los vecinos, y para trabajar en ellas se encerraba en un cuarto al  que no podían entrar ni su mujer ni sus hijos.
 Hasta el  llavero de la casa es una jaula, y una jaula es donde Esteban cree que  vive confinada su familia y sus vecinos, a los que intenta hacer cambiar  sin éxito.
 La Cuba que le obligó a marcharse, arrinconado por ser homosexual, le empuja a una nueva huida, esta vez sin retorno.
 En "Habana Eva", de Fina Torres, es la mirada de un adinerado  fotógrafo venezolano la que explora la isla, pero en este caso el  extranjero se siente fascinado por su belleza y por la de una costurera  llamada Eva.
 Es Eva la que, tras encontrarse con el  venezolano, comienza a cuestionarse su vida, hasta darse cuenta de que  nunca ha sido feliz en la isla.
 Su sueño es ser diseñadora de  moda, pero trabaja en un taller donde las reglas son tan estrictas que  no puede ni siquiera cambiar un botón de lugar.
 Las compañeras  con las que cose viven obsesionadas con la telenovela, que ocupa el  centro de unas vidas que transcurren del taller a casa y de casa al  taller.
 La directora Fina Torres recurre al personaje de Eva para abrir un interrogante sobre el futuro de una Cuba que se debate entre el ayer y lo que podría ser el mañana.
 El documental "La Salsa Cubana" refleja la vida cotidiana en Cuba a través de un baile coreografiado llamado "la rueda de casino".
 "La vida en Cuba es difícil. Es un país con muchísima cultura, pero la pobreza está en  todos los rincones", mencionó el director del documental, el  estadounidense Eric Joseph Johnson, que este lunes estrenó su ópera prima en  el festival.
 "La Salsa Cubana" habla del futuro de la isla a  través de los bailarines, porque algunos de ellos solo utilizan los  pasos tradicionales, mientras que otros no cejan en perfeccionar los  movimientos básicos.
 En ninguna de estas películas la crítica  política es la trama principal, sino que los directores la ejercen con  sutileza, en el trasfondo de sus historias.
 El Festival de Cine Latino de Chicago, que comenzó el 1 de abril y durará hasta el 14, muestra en su 27ª edición 120 películas de América Latina, España, Portugal y EE.UU.
