La Intendencia Metropolitana de Santiago decretó para  este miércoles la segunda preemergencia ambiental del año, debido a los  altos índices de polución que afectan a la capital chilena, una de las  ciudades más contaminadas del planeta.
 Según un comunicado de  la autoridad regional difundido esta noche, la medida prohíbe la  circulación entre las 07.00 horas (11.00 GMT) y las 21.00 (01.00 GMT del  jueves) para los vehículos con sello verde (convertidor catalítico)  cuyas placas patentes terminen en los dígitos 3 y 4.
 Además,  no circularán los vehículos no catalíticos, que prácticamente no existen  en la región metropolitana, cuyos dígitos finalicen en 1, 2, 3, 4, 5 y  6.
 La medida incluye además el cese de sus funciones de 841  fuentes fijas industriales, de acuerdo con la disposición emanada de la  autoridad de salud.
 Asimismo está prohibido encender todo tipo  de calefactores a leña o biomasa, estén o no provistos de sistema de  doble cámara de combustión, en toda la capital chilena, de 6,2 millones  de habitantes.
 En tanto, el ministerio de Educación está  facultado para suspender las clases de Educación Física en aquellos  establecimientos que estén ubicados en comunas donde la contaminación es muy alta.
 La capital chilena, la segunda urbe más contaminada de América Latina  después de Ciudad de México, registra constantes episodios de alerta  ambiental desde hace más de 20 años, que afectan de sobremanera a los  bebés y a las personas mayores de edad.
 Situada en un valle  rodeado de cerros, en otoño e invierno se produce un fenómeno de  inversión térmica, el aire es más frío a nivel del suelo, lo que sumado a  la ausencia de brisas impide la dispersión de las partículas  contaminantes, este año agravada por la casi nula existencia de agua  lluvia.
