El Telégrafo
Ecuador / Domingo, 24 de Agosto de 2025

Grecia reabre sus bancos y relaja el corralito

Los analistas políticos dan por descontado nuevas elecciones en el país heleno

Grecia reabrirá sus bancos mañana y facilitará un poco los retiros de efectivo y las compras con tarjetas de crédito, según un decreto publicado ayer, tras la remodelación del gobierno.

Hace tres semanas los griegos pueden retirar un máximo de 60 euros por día. Pero, a partir del lunes, podrán retirar en una sola vez hasta 420 euros, es decir el acumulativo semanal del límite diario.

Así, por ejemplo, una persona podrá retirar 200 euros un día, pero sus retiros para el resto de la semana no podrán superar los 220 euros. Además, los griegos podrán utilizar nuevamente sus tarjetas de crédito en el extranjero.

Asimismo, se podrán realizar transferencias de hasta 5.000 euros por trimestre para los jóvenes que estudian en el extranjero y los griegos que reciben tratamiento médico fuera del país podrán sacar 2.000 euros. Pero, para lo demás, los controles de capital seguirán en pie.

Con este paquete de medidas restrictivas, las autoridades buscan evitar retiros masivos y por ende una caída en cascada de los bancos griegos. Este es el primer decreto que se publica desde la remodelación del gobierno.

Los nuevos ministros prestaron juramento ayer después de que el premier Alexis Tsipras apartara a los que se opusieron a las reformas exigidas por los acreedores.

Con esta decisión, el primer ministro, en el poder desde hace apenas 6 meses, impuso su autoridad, tras una votación en la que varios dirigentes de su partido, Syriza, rechazaron las reformas exigidas por los acreedores para el tercer rescate.

Sin embargo, según los analistas, esta remodelación superficial no bastará para evitar que se celebren elecciones legislativas anticipadas, posiblemente este mismo otoño (boreal).

Yanis Varoufakis, quien dimitió de su cargo de ministro de Finanzas a principios de julio, se ha convertido ahora en el portavoz de los rebeldes. El exfuncionaro declaró que el nuevo plan de rescate financiero para Grecia, que aún no está terminado, era “ya un fracaso”.

La disposición del primer ministro de distanciarse del ala más radical de su partido y el voto positivo del parlamento griego han contribuido a restaurar una calma, aunque precaria, con los socios europeos y los acreedores, pero sin garantía de una supervivencia financiera a largo plazo.

Grecia recibirá una ayuda de emergencia de 7.000 millones de euros para hacer frente a sus compromisos más urgentes, otorgada el jueves por los ministros de la Eurozona. Pero apenas entregada, desaparecerá casi inmediatamente.

Atenas debe hace frente el lunes al pago de 4.200 millones de euros al Banco Central Europeo (BCE) y sacarse de encima una importante deuda con el FMI. (I)