El primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras, anunció ayer su renuncia en un mensaje televisado y convocó a elecciones anticipadas, 7 meses después de comenzar su mandato y en medio de una rebelión en el seno de su partido izquierdista Syriza después de acordar el nuevo rescate para el país.
“Pronto voy a presentar mi renuncia, como la renuncia de mi gobierno, al presidente de la República”, dijo Tsipras. “Mi mandato del 25 de enero ha vencido. Ahora el pueblo debe pronunciarse. Ustedes con su voto decidirán si negociamos bien o no”, agregó en un mensaje transmitido por la televisión pública griega.
Según los medios de comunicación helenos, la fecha propuesta por Tsipras para esta nueva consulta es el 20 de septiembre.
Una vez que Tsipras presente la dimisión de su gobierno al presidente de la República, Prokopis Pavlópulos, este le encargará el mandato para formar un nuevo gobierno en un plazo de tres días.
Los medios especulan que Vassiliki Thanou-Christophilou, presidenta del Tribunal Supremo de Grecia, podría ser la encargada de ocupar el cargo de primer ministro en el gobierno de transición.
Pero si Tsipras no logra la misión, tiene la opción de devolver este mandato inmediatamente al presidente, lo que se estima como lo más probable. En este caso, Pavlópulos encargará la formación de gobierno al presidente del principal partido de la oposición, el conservador Nueva Democracia; y en caso de fracasar, el tercer líder que recibirá el mandato será el del partido neonazi Amanecer Dorado.
Si, como se espera, este último no puede formar gobierno, al no obtener el respaldo del Parlamento, se convocará a los líderes políticos para explorar la posibilidad de constituir un gobierno de amplio apoyo. Si esto tampoco se consigue, entonces se formará un gobierno transitorio que tiene como único cometido la organización de las elecciones anticipadas en un plazo máximo de 30 días. El primer ministro de este gobierno debe ser uno de los presidentes de los 3 tribunales supremos de Grecia.
Después de llevar adelante una campaña contra las medidas de austeridad, el mes pasado, el líder izquierdista de 41 años aceptó un programa de rescate de 86.000 millones de euros de Europa y el Fondo Monetario Internacional, bajo la condición de aprobar alzas de impuestos y recortes de gastos, en medio del fuerte riesgo de un colapso del sistema bancario griego.
Tsipras no logró el apoyo de su mayoría de gobierno el pasado viernes durante la votación del tercer rescate financiero al país, que salió adelante con los votos de la mayoría de partidos de la oposición, al igual que dos paquetes de reformas anteriores. (I)