Estados Unidos no solo espió a presidentes franceses, sino también a ministros y empresas galas. Según nuevas filtraciones de WikiLeaks, la Agencia Nacional de Seguridad norteamericana interceptó comunicaciones de François Baroin y Pierre Moscovici, que fueron ministros de Economía de 2011 a 2014.

WikiLeaks mantiene además que los servicios de inteligencia estadounidenses pidieron a Australia, el Reino Unido, Canadá y Nueva Zelanda que le proporcionara información sobre los contratos de exportación de compañías francesas de más de 200 millones de euros en los sectores de telecomunicaciones, energéticos y sanitarios.

La semana pasada, WikiLeaks reveló que Estados Unidos realizó escuchas al actual presidente François Hollande y a sus predecesores Nicolas Sarkozy y Jacques Chirac. Washington lo niega. (I)