Al menos 23 personas, entre ellas una mayoría de combatientes anti Al Qaida, murieron y 44 resultaron heridas este lunes en un atentado suicida en Taji, a 25 km al norte de Bagdad, informaron fuentes médicas y de seguridad.
Un kamikaze hizo estallar el cinturón de explosivos que llevaba adosado al cuerpo cuando miembros de la milicia Sahwa, que combaten contra la red extremista, estaban cobrando sueldos en ese momento.
El ataque causó heridas a otras 50 personas, algunas de ellas en estado grave, quienes fueron trasladados a los hospitales locales para recibir tratamiento médico.
Los Sahwa, que fueron formados a fines de 2006 por los jefes tribales de las regiones sunitas, lograron desalojar a la mayoría de los militantes de Al Qaida, pero estos últimos llevan a cabo regularmente operaciones de represalia contra las milicias, el Ejército, la policía y responsables políticos.