Bélgica, con su convincente regreso a un Mundial 12 años después de su última participación, sentó en Brasil 2014 las bases de un futuro que espera que sea radiante, en un torneo que según su capitán, Vincent Kompany, fue ‘el punto de partida’ de una nueva generación.

“Esta Copa del Mundo es un buen arranque para nuestra generación. Este grupo va a ganar madurez con el tiempo. En 4 años en Rusia, este equipo será más fuerte y tendremos otras oportunidades”, explicó el defensa central.

Kompany, referente del equipo, tendrá 32 años en 2016, cuando los ‘Diablos Rojos’ afronten la Eurocopa de Francia como uno de los favoritos al título. La mayor parte de sus compañeros, algunos años más jóvenes, llegarán en una edad ideal al torneo continental.

Bélgica contaba en Brasil 2014 con la selección más joven de las que superaron la primera fase, con algunos jugadores que no habían cumplido los 20 años, como Divock Origi, que tuvo un papel principal, o Adnan Januzaj, más testimonial.

Otras piezas importantes como Kevin de Bruyne, Eden Hazard, Romelu Lukaku o Thibaut Courtois, todos pertenecientes a clubes de prestigio, acaban de abandonar las etiquetas de promesas para convertirse en futbolistas relevantes en el Viejo Continente.

Algunos esperaban la explosión de Hazard como una de las grandes estrellas. El futbolista del Chelsea, que en la primera fase fue decisivo en varios momentos, estuvo desaparecido ante Argentina, hasta el punto que Wilmots le sustituyó en la segunda parte para buscar un juego más directo.

Otro punto negativo en esta Copa del Mundo que debe resolver Bélgica es la falta de un goleador de clase mundial, a pesar de la sorpresa de Origi y de los buenos minutos que ofreció en octavos Lukaku. En ese partido, ante Estados Unidos, el equipo centroeuropeo necesitó de 32 disparos hasta encontrar el gol (2-1 en la prórroga).

Origi, que entró en la lista en el último momento, completó una excelente primera fase, quitando el puesto en el once al consagrado Lukaku. El ariete del Chelsea mostró sus lagunas técnicas en los pequeños espacios, cuando no tiene campo para explotar su potencia, como sí hizo en la prórroga ante Estados Unidos. La defensa parece sólida, con solo 3 goles encajados en 5 partidos, uno de ellos de penal, y tiene un portero de garantías y experiencia, Courtois, para muchos uno de los mejores del mundo.

Además, Bélgica ha contado con jugadores que rindieron por encima de lo esperado, como De Bruyne, ofreciendo pundonor y calidad en el centro del campo.