Pero para llegar a ser como son los perros no sólo tuvieron que lucir más lindos y amigables. La ciencia descubre que también cambiaron sus estómagos porque los ancestros del perro tuvieron que afinar su habilidad para robar comida de los humanos. Y Eso fue clave para empezar a convivir.
En el estómago del perro se esconden algunas claves para explicar la evolución del lobo hasta convertirse en el actual perro. Investigadores estadounidenses y suecos, han concluido que algunos lobos experimentaron cambios en su estómago para poder comer restos de alimentos vegetales abandonados por los humanos.
Hace diez o doce mil años los estómagos de los lobos empezaron a presentar ciertas mutaciones que les ayudaron abandonar la dieta netamente carnívora que tenían y empezar a comer ciertos alimentos vegetales ricos en almidón que estaban presentes.
Los científicos han estudiado el material genético de 12 lobos y 50 perros de todo el mundo y descubrieron que los perros tienen 3 genes que no tienen los lobos que intervienen directamente en el metabolismo del almidón de los vegetales. (CONTINÚA)